El principal problema es que los rescatadores no consiguen encontrar a los mineros atrapados.

AGENCIAS - MOSCÚ
Equipos de socorro trabajaron durante toda la noche a contrarreloj para rescatar a los 28 mineros atrapados en un mina de carbón siberiana en la que una explosión de metano causó esta madrugada la muerte de al menos otros 30 trabajadores. El accidente tuvo lugar en la mina «Taizhina» de la cuenca hullera de Kuzbass, Siberia Occidental, a 650 metros de profundidad cuando en el interior de la explotación se encontraba 52 mineros. Hacia 08.00 de la mañana, hora peninsular, los equipos de socorro habían conseguido rescatar a 15 mineros, cuatro de ellos gravemente heridos, y recuperar una veintena de cadáveres.

Los trabajos de rescate los encabeza el gobernador de la región de Kémerovo, Amán Tuléyev, quien a primera hora de la mañana se desplazó al lugar del accidente. El director de la mina, Valeri Naumkin, declaró a la agencia oficial rusa Itar-Tass que la explosión de metano «afectó a varias galerías, lo que dificulta los trabajos de rescate». «En las profundidades de la mina trabajan 13 equipos de socorristas, que hacen todo lo que está a su alcance para llegar lo más rápido posible al lugar donde se encuentra la gente», dijo Naumkin.

Según las autoridades, no hay humo ni gases nocivos en las galerías, de lo que se concluye que la explosión de metano no provocó incendios. Los socorristas destacaron asimismo que no se observan derrumbamientos en el interior de la mina y que la gran dificultad para hallar a los desaparecidos es la falta de comunicación con ellos y la enorme longitud, de varios kilómetros, de las galerías de la explotación. La Fiscalía de la ciudad de Asinninki, en cuya jurisdicción se encuentra la mina «Taizhina», incoó un proceso penal por «violación de normas de seguridad en explotación minera». El portavoz del Ministerio de Emergencia para la región de Kémerevo, Valeri Korchaguin, dijo que en la mina «se llevaban a cabo trabajos de reparación».