El magrebí que fue detenido el pasado lunes por la policía en un
bar de ses Figueretes y que estaba en busca y captura desde hacías
varios días por intentar apuñalar a un hombre aceptó anteayer una
condena de nueve meses de prisión por las graves amenazas que
finalmente se le imputaron. El sospechoso, M.T., de 46 años,
natural de la ciudad marroquí de Tánger y sin papeles de residencia
en España, sin embargo, sólo estará preso hasta que se formalice su
expulsión definitiva del territorio nacional. Dicha pena supondrá
que, en teoría, no podrá volver a pisar suelo español.
Dicha medida se acordó dentro de un juicio rápido que se celebró
anteayer en los juzgados de Eivissa después de que el Cuerpo
Nacional de Policía entregara al juez al acusado. El acuerdo fue
posible tras llegarse a una sentencia de conformidad.
La sustitución de la pena por la expulsión del país es posible,
como ocurre en muchas ocasiones, de acuerdo con las modificaciones
que se han hecho dentro de la legislación penal y que afectan
directamente a ciudadanos no comunitarios. La propia policía
formuló esta propuesta en su atestado.
M.T., quien ya poseía antecedentes por infracción contra la Ley
de Extranjería, además de otros arrestos por lesiones, amenazas y
agresión sexual, residía desde hace tiempo en Eivissa. La policía
le buscaba desde que el pasado 25 huyo del paseo marítimo (del de
Eivissa y no del de ses Figueretes, como se informó por error)
después de que supuestamente amedrentara a un hombre e intentara
herirle con un arma blanca cuando dicha persona se hallaba, al
parecer, en un local de la Avenida 8 d'Agost.
La policía encontró después entre la maleza, gracias a la ayuda
de un taxista, una bolsa con tres cuchillos de hojas de 20, 15 y 10
centímetros, así como un doble pincho.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.