La Audiencia Provincial ha condenado con penas de inhabilitación y seis meses de multa con 6 euros diarios por un delito de inviolabilidad del domicilio a dos de los cuatro guardias civiles que tuvieron que sentarse en el banquillo semanas atrás en Eivissa para responder de distintas acusaciones que se formularon a raíz de una operación antidrogas realizada en Talamanca y en la que la Benemérita intervino 1,6 kilos de cocaína y detuvo a cuatro sospechosos. El servicio fue conocido como 'Operación Peca' y se desarrolló en verano de 2000. Se da la circunstancia de que la mujer que denunció una entrada ilegal en su casa se halla presa en Goa (India) cuando tuvo lugar el juicio por un delito de tráfico de drogas. La Audiencia, que absuelve a los otros dos acusados, impone dos años de inhabilitación a los agentes a los que sí se les reprueba su conducta. Este fallo, sin embargo, sólo es suscrito por dos de los tres magistrados que compusieron en su día la mesa del tribunal, Margarita Beltrán y Cristina Díaz. El fallo no cuenta con el apoyo del tercer magistrado, Víctor Rafael Rivas, quien en un voto particular disiente de la mayoría y argumenta que la sentencia debería haber sido absolutoria para todos.