El menor de 13 años que la Policía Local de Eivissa condujo al
Centro de Protección de Menores, debido a las insalubres
condiciones en que vive su familia, evidenciaba un estado de
malnutrición. No obstante, su estado de salud no corría grave
peligro, ya que los médicos del hospital de Can Misses le dieron el
alta el mismo día en que llegó al centro sanitario para ser
sometido a revisión, el pasado miércoles. Además de malcomido, el
menor estaba completamente pálido e iba mal vestido.
Los policías retiraron al menor de la tutela de sus padres y lo
internaron en el Centro de Protección de Menores a iniciativa de
una médico de la Conselleria de Sanitat y de dos asistentes
sociales del Ayuntamiento de Eivissa, que acompañaron a los agentes
cuando entraron, supuestamente por la fuerza, en el domicilio de
esta familia, en el barrio de ses Figueretes. Según el relato
policial, en el piso, de escasos 70 metros cuadrados, se
encontraron a los cinco miembros de la familia -padre, madre y los
tres hijos- y doce animales, seis perros y seis gatos. Los
policías, la médico y los asistentes tuvieron que utilizar
mascarillas debido el hedor, denunciado por los vecinos. Ahora,
quien decidirá el futuro del menor serán los servicios sociales.
Mientras, la custodia del niño corresponde al Estado.
La Fiscalía de Eivissa permanece por tanto a la espera de poder
tramitar la decisión que adopten los servicios sociales, que tienen
que decidir si se le devuelve o no la custodia del niño a los
padres. En 1997, esta familia se enfrentó por primera vez a este
mismo problema. Los servicios sociales retiraron a sus padres la
custodia de los dos hijos mayores, que en aquel año eran menores de
edad, también por las malas condiciones higiénicas en las que
tenían su casa. Finalmente, se optó casi al mes por devolverles la
custodia a los padres.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.