La chica trabajaba en el club 'La Tortuga', en Talamanca.

Una comunicación recogida por Comisaría procedente de Hungría alertó a la Comisaría de Eivissa de la posible presencia de una joven de este país que se hallaba en problemas después de que estuviera viéndose obligada a trabajar contra su voluntad en el club de alterne La Tortuga, en la zona de Talamanca. El comunicante sólo dio el nombre de pila de la afectada. La chica, 'reclutada' para trabajar de bailarina en la isla, pudo ser liberada y tres personas, un hombre y dos mujeres, fueron detenidas. La joven ya ha sido repatriada.

El Grupo de Extranjería, ante las sospechas que se recogieron, consideró oportuno montar un control en el citado club. Los agentes verificaron la documentación y situación de un total de 28 chicas, todas ellas procedentes de países del Este, que trabajaban en el local. Tres de ellas se encontraban en situación ilegal. La actuación policial, además, permitió identificar como G.C.R. a la chica húngara que, supuestamente, se hallaba en dificultades. Una vez producido el contacto, los policías fueron informados por la propia chica de que estaba siendo amenazada por un compatriota y que le robaban el dinero y sus efectos de forma continua como forma de presión. Esta mujer también relató a los agentes de Extranjería que se decidió a viajar a Eivissa después de que un amigo de la familia le ofreciera un contrato de bailarina. Al llegar a la isla, sin embargo, se encontró sin dinero y tuvo que recurrir a ir de club en club para poder mantenerse. R.K., un húngaro de 22 años, y su compatriota Z.E.C., de 26, así como la rumana G.S.R., de 23, fueron arrestadas de acuerdo con la comisión de un posible delito contra los derechos de los trabajadores.