La Fiscalía de Eivissa considera que, independientemente de las investigaciones judiciales que se lleven a cabo tras las denuncias por presuntos malos tratos presentadas por dos ecuatorianos contra Comisaría, existían indicios suficientes para que los sospechosos tuvieran que responder ante un banquillo por los cargos de robo con violencia y lesiones por los que finalmente han sido absueltos.

Fuentes de la Fiscalía explicaron que la policía, sin perjuicio de las otras actuaciones que ahora son objeto de averiguaciones, presentó un informes sobre hechos que era preciso ver en un juicio después de que, como conclusión a la investigación judicial, se hallaran pruebas para acusar por un supuesto atraco en el que la víctima había resultado herida con un corte en la mano. La ausencia de la mujer que denunció a los cuatro ecuatorianos por un atraco en ses Figueretes, así como la imposibilidad material de localizarla para declarar en la vista, obligó al representante del ministerio público a retirar la acusación por robo, según hicieron hincapié las mismas fuentes recogiendo lo ya publicado por este periódico.

Ausente

Ante la imposibilidad de enfrentar su testimonio al de los sospechosos, el fiscal decidió quitar la acusación por robo (pero no la de lesiones). La juez, con los cargos retirados y aplicando el principio de presunción de inocencia, anunció que los iba a absolver de la acusación de robo mientras la vista continuó con un único acusado por las lesiones sufridas por la víctima. En esta causa la sentencia fue también absolutoria. El último capítulo de este caso ha estado en la denuncia presentada en el juzgado por miembros de la plantilla de Comisaría por presuntas calumnias contra los miembros de Els Verds que respaldaron a los dos ecuatorianos que dijeron haber sido víctimas de malos tratos y que, a su vez, son ahora también objeto de las acciones legales emprendidas por la policía.