La policía ha detenido a cinco personas, entre ellas los responsables de tres establecimientos de Eivissa, en el transcurso de una investigación que ha servido para desarticular a una banda rumana que copiaba tarjetas en Francia y luego hacía cobros fraudulentas en Eivissa. El montante total de la estafa se eleva 51.500 euros (cerca de ocho millones y medio de pesetas).

La investigación también ha permitido descubrir que las tarjetas eran pasadas en un restaurante de es Canar, en la zona de Can Soldat, cuando éste precisamente se encuentra cerrado por estar fuera de temporada, y en dos empresas náuticas, una de la carretera de Sant Josep y otra ubicada en el casco urbano de Eivissa. Los sospechosos se reunían en el citado restaurante a horas intempestivas y durante poco tiempo.

La operación que ha culminado con la detención de los españoles Antonio T.M., de 36 años y natural de Santa Eulària, Miguel Angel C.M., nacido en la localidad francesa de Montelimar, y de los rumanos Calin D., Ciprian S. y David N., todos ellos con edades entre los 23 y los 30 años, tuvo lugar dentro pesquisas que realizaba la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco).

Todo ello, tras seguirse la pista de los rumanos con la conexión de grupos del Este dedicados a la prostitución, inmigración ilegal y delitos contra la propiedad.Al parecer, todos los acusados quedaron libres tras pasar ante el juez.