La peligrosa combinación de factores que supone el consumo excesivo
de alcohol con la conducción quedó de nuevo de manifiesto en la
madrugada de ayer, cuando un conductor bajo los efectos de esta
sustancia estrelló su coche contra tres taxis estacionados.
Los hechos tuvieron lugar sobre las tres de madrugada de ayer en
la avenida Bartomeu Rosselló de Eivissa. Según fuentes de la
Policía Local de Eivissa, J.A.O.C., nacido en 1964 y con residencia
en Madrid, conducía un Citroen Jumpi, matrícula 0661BMX desde la
Marina y, en el momento de incorporarse a la avenida Bartomeu
Rosselló, perdió el control del coche, estrellándose contra tres
taxis estacionados en la parada que se encuentra en dicha calle. La
violencia del impacto provocó que el primer taxi contra el que
impactó quedara montado sobre la acera.
Afortunadamente no hubo heridos, pero los policías municipales
que se desplazaron al lugar comprobaron que J.A.O.C. estaba bajo
evidentes síntomas etílicos. Tras ser sometido a un test de
alcoholemia en las dependencias policiales, se constató que el
infractor presentaba una tasa de 1,26 en dicho test, cuando el
máximo índice permitido está situado en 0,25.
Tras realizar todos los trámites pertinentes a la infracción
cometida por J.A.O.C. éste quedó en libertad a la espera de que sea
citado judicialmente.
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