Lucio del Valle, durante la reunión de la Agrupación de Vigilantes de Seguridad celebrada ayer. Foto: K. TABERNER

TW
0

Lucio del Valle, empleado fijo de la empresa Prosegur desde 1999, reconoce que «la posición de fuerza la tiene la empresa», aunque asegura que no dará «su brazo a torcer» en el contencioso que acaba de abrirse por el intento de la misma de trasladarle a Palma. Según el afectado, «es muy sospechoso» que el traslado se solicite «en el momento en el que Prosegur recibió la comunicación oficial de que había sido escogido como responsable general de la Agrupación de Vigilantes de Seguridad de Eivissa y Formentera». Por este motivo, Del Valle ha impugnado dicho traslado en los Juzgados de Eivissa.

Dicha impugnación debería derivar en un acto de conciliación y, si no hubiera acuerdo, en un juicio. «El problema es que el juicio podría tener lugar cuando ya habría sido trasladado», comentó Del Valle.

«Legalmente pueden trasladarme, pero desde la Agrupación entendemos que se trata de una persecución sindical y así lo queremos denunciar», dijo ayer Del Valle a este periódico. De hecho, la Agrupación tiene previsto convocar una manifestación si la intención de Prosegur continúa en la misma línea.

La orden de traslado dictada por la compañía de seguridad establece que Del Valle debe presentarse en su nuevo destino el próximo día 10 de marzo y el afectado no tiene ningún reparo en reconocer que está dispuesto a irse si la empresa «no atiende a razones» durante el acto de conciliación, aunque asegura que desde la Agrupación «se hará todo lo que sea necesario dentro de la legalidad» para que eso no ocurra.

Del Valle, casado y con un hijo de corta edad, acaba de adquirir una vivienda en Eivissa y el traslado le obligaría a separarse de su familia, ya que su esposa «tiene un trabajo fijo».

«Creo que están coartando mi libertad sindical», afirma sin rodeos el responsable general de la Agrupación. «Sospecho que en Palma intentarán colocarme en el peor de los servicios y con inspectores encima continuamente para ver si pueden acusarme de alguna cosa», remarca, especificando que no se le ha comunicado por cuanto tiempo deberá permanecer en Palma.