La Guardia Civil de Tráfico realizaba ayer distintas gestiones para
intentar identificar a un joven de una edad comprendida entre los
20 y los 25 años de edad que pereció de madrugada al ser arrollados
por un autocar en el kilómetro 4'042 de la carretera de Sant
Antoni.
Se da la circunstancia de que el siniestro se produjo a 60
metros justos del sitio donde cuatro personas perdieron la vida el
pasado 19 de agosto, uno de los accidentes más graves habidos en
los Pitiüses y que tuvo lugar en el punto kilométrico 3'982, según
las mediciones efectuadas por los agentes que cubrieron el atestado
aquel fatídico día.
La víctima, la decimoséptima en lo que llevamos de años, es
probablemente un turista, hipótesis sobre la que se trabajaba por
la hora en que ocurrió el atropello, sobre las cinco de la mañana,
y por el lugar, un tramo cercano a las discotecas próximas a esta
carretera y donde cada año suelen registrarse accidentes de estas
características que dejan tras de sí heridos graves e incluso algún
muerto.
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