Un joven de nacionalidad británica ha tenido que ser trasladado a un centro hospitalario barcelonés desde Eivissa al haber ingerido casi cien comprimidos de analgésicos tras una discusión con su novia. K.S., de 21 años de edad, llegó a la isla el pasado día 28 de julio junto a su pareja, dispuesto a pasar unas jornadas de descanso de sol y playa. Pero el pasado día 1 algo salió mal en el seno de la pareja. Tras una discusión, la mujer decidió dejarle plantado, ante lo que K.S. no tomó otra decisión que tomarse todas las pastillas que tuviera a mano. Eran cerca de las tres de la tarde.

El resultado fue la ingestión de 98 comprimidos de analgésico (concretamente de paracetamol). La dirección del hotel en el que se alojaba (situado en el interior de la localidad de Sant Antoni) avisó a los servicios médicos al comprobar que algo iba mal con K.S. Un equipo del Centro Médico Galeno se personó en el lugar para atender en primera instancia al joven, que se encontraba, según fuentes médicas, consciente y con capacidad para mantener una conversación.

Aunque lo que no esperaban los médicos es que K.S. rehusara recibir ayuda para mejorar su estado. Sólo después de una larga conversación con él los médicos, sabedores ya del tipo de pastillas ingeridas, lograron convencerle de que lo más apropiado en aquel momento era su traslado al hospital de Can Misses para someterse a una exhaustiva revisión.

Los facultativos del hospital, por su parte, constataron los daños sufridos por el hígado del joven británico, según relataron ayer fuentes de este hospital, decidiendo su inmediato traslado a Barcelona al tiempo que se lograba contactar con su familia en Inglaterra para darles a conocer lo sucedido.