Un joven de 23 años de edad denunció el pasado domingo ante la Guardia Civil del puesto de Sant Antoni haber sido víctima de un presunto secuestro, cometido, según él, por dos individuos de nacionalidad marroquí que le apretaron el cuello con una correa. El denunciante, quien se da la circunstancia es vecino de esta localidad, acudió al puesto de la Guardia Civil en la tarde del pasado domingo, afirmando que había estado retenido en contra de su voluntad durante siete horas y 40 minutos, pero que después pudo huir del lugar, que no logró a especificar.

Los agentes que le atendieron comprobaron que el joven presentaba lesiones en el antebrazo, así como la marca de una soga en el cuello y pequeñas erosiones en la espalda. El denunciante detalló la descripción física de los dos supuestos secuestradores. Señaló que ambos tienen entre 25 y 30 años de edad pese a que no aportó datos sobre el sitio en el que fue retenido.

Los dos supuestos secuestradores fueron descritos como personas de complexión atlética, de una altura aproximada de 1.80 y ambos con el pelo corto, negro y rizado. De momento no se ha detenido a nadie en relación a este tema., aunque la Benemérita continúa las averiguaciones a fin de esclarecer verdaderamente lo sucedido. El denunciante no quiso explicar, no sólo el lugar donde había estado retenido, sino tampoco los motivos por los que estos dos individuos intentaron ahogarle con la soga. La investigación baraja la posibilidad de que lo sucedido bien podría ser un ajuste de cuentas por un asunto relacionado con el tráfico de drogas en el que todos los protagonistas de este suceso se han visto implicados.