El sospechoso se arrojó al agua al ver que el propietario de la embarcación le daba alcance a bordo de otra lancha. Foto: VICENÇ FENOLLOSA

Acostumbrados a los robos de coches y motocicletas, no deja de sorprender que alguien intente sustraer una lancha de recreo. Pero esto es exactamente lo que sucedió en la mañana de ayer en Formentera y por lo que fue detenido un joven sevillano en el puerto de Eivissa, tras tener que ser rescatado en es Freus por un barco de la compañía Baleària que cubre la línea entre las Pitiüses. Según informaciones recogidas por este periódico, el joven se hizo con la lancha e inició la huida. El propietario, junto con unos amigos, vieron como la embarcación se alejaba y decidieron seguirla a bordo de una segunda.

A la altura de es Freus, sin que se conozcan exactamente las causas, la lancha sustraida falló, dejando al ladrón a merced de la marea. El propietario y sus amigos se acercaban a él, por lo que decidió arrojarse al mar para intentar huir a nado, aunque la segunda lancha le dio alcance y, según testigos oculares que se encontraban a bordo del rápido de Formentera, comenzó a describir círculos alrededor suyo, mientras desde el agua lanzaba gritos de auxilio.

El barco comercial se aproximó a la zona y logró izar al joven sevillano a bordo, quien fue seguido por el propietario de la lancha sustraida. Ambos finalizaron su travesía hasta el puerto de Eivissa a bordo de esta embarcación de la compañía Baleària. En Eivissa, agentes de Comisaría y varios efectivos del Grupo de Especialistas en Actividades Subacuáticas (Geas) de la Guardia Civil les estaban esperando. Durante varios minutos, el joven permaneció en el interior del barco y, finalmente, poco después del mediodía, era detenido y conducido a Comisaría, donde el propietario de la lancha presentó la denuncia correspondiente.