El vecino de Santa Eulària se hallaba preso en la cárcel desde el fin de semana.

La declaración clara de un testigo que asegura ahora que es imposible que Alberto F.R. sea el hombre que vio en actitud sospechosa poco después de comenzar las llamas en el Pla de ses Formigues ha sido decisiva para que se ordene la puesta en libertad sin fianza del vecino de Santa Eulària que estaba preso por esta causa.

La descripción física realizada de un hombre de espaldas no coincide plenamente y con absoluta certeza con la del autor que supuestamente causó el fuego. Así lo manifestó el testigo que ha dado un giro a los primeros pasos que ha dado la investigación que lleva a cabo el juzgado de Instrucción número 3 de Eivissa para ahondar en las pesquisas efectuadas hasta la fecha por el instituto armado. Ante este testimonio, y al parecer hay un segundo testimonio que lo apoya, el fiscal del caso no se opuso a que se decretara una libertad que ya se adelantó que se iba a pedir por el arraigo social del acusado.

Alberto F.R., quien siempre ha mantenido su inocencia con el total apoyo de su familia y sus amigos y que justificó su presencia en la zona por tener propiedades en Sant Vicent, salió de la cárcel a las dos de la tarde después de haber estado preso desde el fin de semana.

La investigación judicial, sin embargo, prosigue para aclarar todos los pormenores en un caso que de producirse el procesamiento de alguien debe verse ante un jurado con penas de hasta cinco años de cárcel, tal y como informó ayer este periódico.