La furgoneta robada fue localizada sobre las cinco de la mañana, poco después de la sustracción en la zona portuaria de Eivissa.

La colaboración entre la Guardia Civil y la Policía Local en Santa Eulària permitió en la madrugada de ayer actuar con rapidez e interceptar en Sant Carles una furgoneta de Correos que pocas horas antes había sido sustraída en Eivissa supuestamente por dos jóvenes, al parecer, un belga y un tailandés que se encuentran en la isla de vacaciones.

La furgoneta de Correos, modelo Citröen, fue robada cuando se encontraba cargada con sacas, cuyo contenido no ha trascendido. El robo se produjo durante la misma madrugada y, según la información recogida por este periódico, el vehículo se hallaba estacionada en la zona portuaria, probablemente para hacer hoy el reparto.

Todo apunta a que los dos sospechosos, de unos 20 años de edad, intentaban abandonar la furgoneta en la zona de Can Curreu cuando se vieron sorprendidos por el dispositivo montado por el puesto de la Benemérita de Santa Eulària y la Policía Local instantes después de que se recibiera una llamada avisando de la presencia del vehículo y de dos personas que estaban registrando unas sacas.

Todo indica también que los dos jóvenes detenidos habían tenido problemas con la furgoneta y se disponían a marcharse tras sufrir una avería. De hecho, el vehículo presentaba golpes en su parte posterior y anterior y se cree que fue metida por varios caminos. Además, la primera inspección revelaba que posiblemente había tenido un problema con el motor y que el lugar donde fueron encontrados era el final de su aventura. Ambos sospechosos quedaron detenidos en el puesto del instituto armado en Santa Eulària, lugar donde se concluirá el atestado.