La policía investiga desde ayer si una venganza, posiblemente de carácter pasional, está detrás de un incendio que se declaró en la madrugada de ayer en un garaje del edificio «Los Girasoles II» de la Avenida 8 de Agosto, un hecho que obligó al desalojo de todas las viviendas al penetrar rápidamente el humo en los pasillos del inmueble. El fuego fue localizado en un coche, un Toyota (IB-3473-DS) de color rojo y reciente adquisición, que estaba estacionado al fondo del aparcamiento subterráneo y que era propiedad de un vecino.

Este mismo vecino, al parecer y según lo recogido por este periódico, había notado antes que quemaban papeles en la puerta de su casa. Este hecho, unido al incendio en el garaje, ha sido relacionado con posibles desavenencias por despecho surgidas por parte de una ex compañera del afectado con éste, una posibilidad que constituía ayer el centro de la investigación que aborda Comisaría. Los vecinos, unos 50, tuvieron que estar una hora en la calle con intenso frío.

El humo fue detectado pasada la medianoche cuando salía del garaje por una puerta interior del bloque. En pocos segundos saltó la alarma entre el vecindario, al tiempo que llegaban al lugar unidades de policía y ambulancias del 061 y Cruz Roja. Los momentos de más tensión se vivieron al descubrirse que una mujer de edad avanzada, de un tercer piso, no había salido de su vivienda y que su marido había decidido intentar llegar hasta abajo por la escalera cuando la presencia del monóxido de carbono entre los pisos era ya preocupante. Este hombre no resultó herido pero posteriormente fue atendido por personal del 061 mientras su mujer seguía en el balcón y agentes de la Policía Local y de Comisaría vigilaban la evolución del incendio por si era necesario rescatarla. La vecina indicaba entonces que no se subiera porque «había mucho humo».