Agentes del equipo de Atestados de la Guardia Civil de Tráfico de Eivissa evitaron ayer una posible muerte después de que el coche que conducía una mujer alemana de 76 años se saliera en una curva en un acantilado de Sant Joan y quedara el vehículo en una situación extremadamente comprometida e inestable con claro riesgo de despeñarse por el precipicio. La conductora, residente en Sant Llorenç, quedó en primera instancia atrapada y la rápida intervención de los guardia de Tráfico no sólo sirvió para liberarla sino para cortar de raíz el peligro de que cualquier movimiento brusco pudiera ser fatal para su persona, según la distinta información recogida este periódico.

La víctima de este accidente, identificada como E.S., que conducía un Seat Marbella con matrícula PM-2646-AT, sólo sufrió heridas leves. Una ambulancia del 061 intervino al conocerse de la existencia del accidente, ocurrido a casi dos kilómetros de la localidad de Sant Joan, y en un primer momento también se movilizaron los bomberos. Estos últimos no llegaron a intervenir al tenerse conocimiento de que Tráfico había podido lograr sacar a la conductora siniestrada. Tras el rescate una grúa pluma maniobraba en la zona del acantilado para retirar el vehículo.