Juan Navarro Marín compareció ante la Audiencia Provincial durante la mañana de ayer. Foto: MARINA MART.

Juan Navarro Marín, el propietario del local 'after hours' de Sant Antoni «New Star» fue condenado ayer en Eivissa por la Audiencia Provincial de Palma a cinco años de prisión por un delito contra la salud pública, tras el acuerdo alcanzado entre el fiscal y la defensa. Navarro Marín se enfrentaba a una pena de 11 años de prisión por tráfico de drogas, además de dos años más por otro delito de atentado y lesiones. Finalmente, el empresario sumará a los cinco años seis meses de prisión por estas últimas imputaciones. El acusado deberá satisfacer una multa de 8.800.000 pesetas. Navarro fue detenido el pasado mes de junio por el Grupo de Investigación Fiscal y Antidrogas de la Guardia Civil (Gifa) tras haberle sido incautadas en el bar «New Star» 3.337 pastillas de éxtasis, además de dos kilos de hachís y 56 gramos de cocaína. Según Sanidad, los éxtasis intervenidos tenían un valor de siete millones y medio de pesetas.

La jornada de ayer en la Audiencia Provincial dio comienzo con la suspensión de las dos primeras vistas por incomparecencia de los encausados, dos de ellos en busca y captura, según el señalamiento de los juicios. La Audiencia vio también como fiscal y defensa llegaban a un acuerdo en el juicio seguido contra José Antonio Domínguez Villalta. Los seis años de prisión reclamados por la Fiscalía por tráfico de drogas se vieron reducidos a dos, a los que se añadió una multa de 500.000 pesetas. Domínguez fue detenido por la Guardia Civil en Sant Antoni cuando se disponía a vender sustancias estupefacientes en el interior de un comercio que regentaba en dicha localidad.

Finalmente, la primera jornada de la Audiencia Provincial terminó por la tarde, con la vista emprendida contra Andrés Radua Correa, para quien la Fiscalía solicitaba 10 años de prisión y 19 millones de pesetas de multa por un delito contra la salud pública. Radua Correa fue procesado tras serle incautado por el Gifa medio kilo de cocaína oculto en el interior de un aerosol enviado desde Colombia. Tras un acuerdo entre fiscal y defensa, Radua aceptó cumplir seis años de prisión, manteniéndose la multa.