Cuatro empresas de las Pitiusas con décadas de trayectoria recibieron este jueves el Premio Posidonia a la Excelencia Empresarial de la Cámara de Comercio de Ibiza y Formentera.
En el Centro Cultural de Jesús, los propietarios de Eiviss Garden, Bonanza, el restaurante Es Pins y Sa Volta, en Formentera, recogieron unos galardones que, emocionados, dedicaron a los suyos.
Como denominador común, las empresas premiadas este año comparten más de cinco décadas de historia, manteniéndose como negocios familiares que van pasando de padres a hijos.
Maruja Serra, de Bonanza, recordó cómo sus suegros endulzaron las celebraciones de muchos ibicencos y alegraron las tardes de verano de numerosos niños cuando, nada más instalarse en Ibiza procedentes de Mallorca, comenzaron a recorrer la isla con su furgoneta de helados. A finales de los años 70 abrirían ya la actual pastelería que todavía se mantiene en Vila.
«El premio nos hace mucha ilusión. Esto te anima a seguir», destacó Maruja, quien recordó que su suegra Magdalena se emocionó mucho al saber que la Cámara les había premiado.
José Cleries, el fundador de Eiviss Garden, llegó a Ibiza un poco por casualidad y acabó abriendo, hace 50 años, uno de los primeros negocios de la isla dedicados al sector de la jardinería. Los hermanos Sala, nietos de los fundadores de Es Pins, aseguraron este jueves que sus abuelos estarían muy orgullosos y felices por recibir el premio de la Cámara y ver cómo el negocio continúa.
Desde Formentera, Francisco Ferrer, Xicu de sa Volta, recibió la Mención Honorífica de la entidad. Según se recordó durante la gala, Ferrer fue pionero en la isla al abrir el primer restaurante de Es Pujols, en una época en la que muy pocos en Formentera apostaban por el sector turístico y de la restauración. Con el tiempo, Sa Volta acabó siendo un hotel y él acabó fundando una delegación de la Cámara de Comercio en la isla. «El turismo ha sido la manera de que muchas empresas salieran adelante. Es muy importante que a quienes se dedican a esto les guste el turismo porque el cliente lo nota mucho», manifestó.
El presidente de la Cámara, Joan Guasch, destacó la importancia de reflexionar sobre los valores y realidades existentes en las Pitiusas, sin obviar las dificultades actuales que cualquier empresario debe superar.
Sobre los premiados, Guasch aseguró que estos negocios son la perfecta muestra de que, a pesar de las crisis y complicaciones, existen negocios «tradicionales» que logran mantenerse como todo un referente en su sector.
«Ibiza no tiene que dejar de ser lo que era. Hay que adaptarse, pero sin perder nuestras raíces», concluyó.
El prestigioso artista internacional Mario Arlatti fue el encargado de elaborar los galardones y lo hizo en esta ocasión acompañado por varios socios de APNEEF (Asociación de Personas con Necesidades Especiales de Ibiza y Formentera).
Entre los discursos institucionales, el presidente del Consell d´Eivissa, Vicent Marí, destacó que, precisamente en la feria ITB de Berlín, la institución insular ha puesto en valor estos días un aspecto muy presente entre los premiados de este año. En este sentido, recordó que en Alemania se aprecia la parte más auténtica de la isla, aquella que mantienen y conservan desde hace años las empresas galardonadas.
«Todos ellos destacan por una actividad profesional desarrollada desde siempre con el compromiso y la voluntad de servicio hacia los clientes, haciendo del respeto a la tradición, de la autenticidad y dedicación, unas señas de identidad muy presentes entre el empresariado ibicenco», afirmó.
Sobre los problemas y retos actuales, Marí ofreció un diálogo abierto y constante para, unidos, seguir consolidando la economía y el tejido empresarial de Ibiza.
Desde la Cámara de Comercio anunciaron que, para conmemorar sus 122 años de historia, en unos meses se publicará un libro dedicado a las empresas pitiusas que a lo largo del tiempo han recibido el galardón de la entidad. En este trabajo se recordarán sus inicios y experiencias, buscando ser un reconocimiento a 70 negocios y empresarios de Ibiza y Formentera que destacaron por diferentes motivos.
Como parte de este homenaje, en la gala celebrada este jueves, representantes de muchas de estas empresas recogieron una litografía de la obra ‘Berma de las posidonias’ de Mario Arlatti.
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Premios, galas y discursos para los mismos de siempre, mientras el pequeño empresario y el autónomo que intenta salir adelante en Ibiza se hunde en impuestos abusivos, regulaciones absurdas y una invasión de competencia desleal que nadie quiere frenar. Mucho hablar de ‘tradición’ y ‘autenticidad’, pero al final los que se benefician son los mismos, mientras los emprendedores de hoy se ven ahogados por burocracia y una inmigración masiva que precariza el mercado laboral. A ver si en vez de tantas litografías y discursos vacíos, se preocupan por defender el tejido empresarial de verdad: el que da trabajo a los españoles y mantiene viva la identidad de la isla