Vicent Marí, ayer, a su llegada a la Escuela de Hostelería para la reunión de las inversiones de los fondos ITS. | Arguiñe Escandón

El presidente del Consell d’Eivissa ha vuelto a pedir auxilio ante la «situación dramática» que vive la institución ibicenca, desbordada por la llegada masiva de menores extranjeros no acompañados y que tiene tutelados. Más de un centenar concretamente. «Estamos saturados, el vaso está lleno, rebosa. Tenemos un problema muy serio, no hago más que denunciarlo. Nunca ha sido un problema de solidaridad, es que no tenemos capacidad ni física ni medios humanos. Tenemos el personal al límite», comentó ayer Vicent Marí.

«Sólo nos faltaría eso», expresó el presidente del Consell d’Eivissa cuando se le preguntó por si era posible que la isla recibiera menas procedentes de Canarias. Hoy está previsto que la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, y el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, se reúnan en Madrid para abordar el reparto de menores migrantes. «Es implanteable que nos traigan más. Si se tiene que hacer un reparto, que se haga también con los que tenemos aquí», reclamó.

Marí demostró su desesperación ante la situación a la que se enfrenta la institución insular: «Hago llamadas de auxilio, pero me encuentro solo y el Gobierno central no se preocupa lo más mínimo Además de gestionarlo y tener pisos por todos los municipios, hacemos lo que podemos con los medios que tenemos».

El presidente del Consell d’Eivissa advirtió que «cada años va a más, somos una ruta consolidada y por más que gritemos estamos peor, porque siguen llegando y cada vez que me reúno con personal de Menores solo me queda llorar con ellos. Es una situación dramática».

Para Vicent Marí, la situación en Ibiza «es comparable o más grave, como en Formentera, que la de Canarias». Yreclamó «que alguien del Gobierno se preocupe de esta problemática, porque esto es (una cuestión de) política exterior. No se pueden devolver (los menas) a sus países con sus padres porque las fronteras cerradas por cuestiones de política exterior».

Conflicto en Santa Eulària

Vicent Marí también se refirió a la polémica que se vive en Santa Eulària, donde el Asociación SantaEulària Empresarial ha reclamado al Consell d’Eivissa que traslade el piso ocupado por menas en el centro del pueblo al considerar que provocan problemas de «convivencia y seguridad» en el pueblo. «Quiero ser muy prudente con este tipo de manifestaciones. Confío en los servicios que presta Menores, se hacen con total garantía. Hay situaciones que no tienen nada que ver los menas, no se les puede achacar todo a ellos. Hay que ser prudentes y no quiero alarmar ni contribuir a sensación de inseguridad. Es evidente que hay problemas, pero no todos achacables a los pisos», apuntó el presidente del Consell d’Eivissa.

Vicent Marí explicó que «cuando un servicio está desbordado hay problemas y la población los sufre, esto lo entiendo, pero el servicio que se presta es serio aunque pueda haber algún episodio desagradable».

«Soy comprensivo con todas las demandas, ojalá pudiéramos llevarlos a otro lado y tener una cantidad de menores más pequeña, pero estamos atrapados en esta isla y somos rehenes de una situación sobrevenida en la que estamos solos», insistió el presidente del Consell d’Eivissa.

En este sentido, Marí reclamó al Gobierno «que aplique las medidas necesarias para que los ibicencos no tengamos que sufrir una situación que se desborda y que si no se ponen medidas irá a más. Hace tiempo que pedimos auxilio y hasta ahora no hemos recibido ninguna respuesta. Es triste».

El pasado fin de semana, la Asociación Santa Eulària Empresarial ha solicitado el traslado del piso donde viven menores extranjeros tutelados por parte del Consell d’Eivissa «a otra zona que no sea el centro del municipio, dada la problemática que su ubicación actual está generando en la convivencia y la seguridad del entorno».

Esta asociación, «como representante de una parte significativa del tejido empresarial» del municipio, manifestó en un comunicado su «preocupación creciente» en relación al «impacto que está teniendo en nuestra sociedad la llegada descontrolada de inmigración irregular».

Aseguran que, tras mantener distintas reuniones con empresarios y representantes de diferentes sectores, «se han evidenciado las inquietudes por el aumento de actos vandálicos, robos y agresiones que están alterando la tranquilidad y seguridad que caracterizan a Santa Eulària». Unos sucesos que, apuntan, «están generando un clima de inseguridad que afecta tanto a los residentes como a la actividad económica del municipio».