Imagen del encuentro que se celebró este viernes por la mañana en la sede del Consell d’Eivissa. | CIE

La consellera insular de Promoción Económica, María Fajarnés, se reunió este viernes con representantes de la Asociación Balear de Autoescuelas para analizar la «preocupante situación» que se vive en la isla de Ibiza a causa de la falta de examinadores de la Dirección General de Tráfico. En la reunión ha participado también la directora de la asociación, Joana Ribas, y la directora insular de Promoción Económica, Josefa Costa.

Según informó la máxima instución insular a través de un comunicado, durante el encuentro quedó patente «la preocupante situación que se vive en la isla por la falta de examinadores en plantilla». Por ello se acordó reclamar a la Dirección General de Tráfico (DGT), dependiente del Ministerio de Interior, que «se atienda esta necesidad ya que actualmente hay dos examinadores que han de desplazarse continuamente desde Mallorca, con lo que eso comparta de pérdida de tiempo y dinero».

La consellera Fajarnés, según el mismo comunicado, «ha puesto el acento en la necesidad urgente de volver a lo que Ibiza había sido siempre». «Hemos ido hacia atrás», ha denunciado, «en lugar de ir hacia delante. En la isla siempre había sido un centro independiente y es lo que ahora reclamamos».

La directora de la Asociación Balear de Autoescuelas, Joana Ribas, por su parte, explicó que «la solución está aquí» puesto que «hay dos examinadores que quien quedarse en la isla». Ribas, además, indicó que «depender de Mallorca supone que, por ejemplo, si has de examinar a varios alumnos por la mañana y el avión va con retraso o, incluso, no viene, que es algo que pasa bastante a menudo, hay que aplazar el examen o, directamente, cancelarlo, con lo que eso supone para todos de pérdida de tiempo y de dinero».

Fue en marzo de 2024 cuando la DGT decidió que Ibiza se convirtiera en un centro desplazado dependiente de Mallorca para las pruebas para la obtención del permiso de conducir. El ente público anunció la contratación de tres examinadores pero centrados en Mallorca y asegurando que de este modo se reforzaba la delegación balear. Además, desde la Jefatura Provincial de Tráfico se indicó también que, gracia a los examinadores itinerantes los funcionarios de la DGT en Ibiza no tendrían que ocuparse de realizar las pruebas y podrían dedicar sus esfuerzos a otros trámites administrativos como la atención al público los cinco días de la semana. Una decisión tomada meses después de que la oficina de Ibiza decidiera atender a los ciudadanos únicamente dos días por semana por la falta de personal, una situación de la que precisamente alertaron las autoescuelas.