La Navidad no solo son regalos, villancicos y luces de colores. Para muchas personas también significa ilusión y esperan con ganas el tradicional sorteo de la Lotería de Navidad. A menos de una semana de la gran cita, las administraciones de la isla viven en un ajetreo constante con clientes habituales, y otros de última hora, intentando dar con su número de la suerte.
Las conversaciones entre los clientes que hacían cola en los establecimientos desde primera hora de la mañana emanaban esperanza de que este año «sea el bueno». «Y dame también dos números del 7», pidió un cliente antes de marcharse mientras, detrás, otro le comenta a un conocido que estaba «preparándose para Navidad, por si este es el año».
El número 13
En este sentido, Mercedes, responsable de la administración ibicenca ‘Eivissort’, asegura que este año han notado un incremento en las ventas de entre un 5% y 6% respecto al pasado. «El sorteo de Navidad es una tradición que gusta mucho. Aunque empezamos a vender los décimos en julio, es ahora cuando se nota el mayor movimiento», explicó.
En su administración, como en tantas otras, también cuentan con lo que llaman ‘lotería viajera’: números procedentes de otras provincias gracias a un intercambio entre administraciones. «Este año hemos traído décimos de Madrid, Málaga, Córdoba o Murcia, porque la gente quiere tener números de las provincias donde más suele tocar», afirmó Mercedes.
Sin duda este año, el 13, el 8 y los tradicionales acabados en 7 y 5 son los más buscados. «Hace ya tres o cuatro meses que el 13 se agotó. Dicen que no, pero la gente lo busca por el morbo», apuntó la vecina.
Sin embargo, no faltan peticiones más específicas y un tanto descabelladas. «Vienen y nos piden ‘a ver si me puedes hacer este número’, como si nosotros pudiésemos fabricarlos», explicó entre risas.
En ‘La 4’, otra administración emblemática ubicada en Avenida de España, Sonia, una de las responsables, lleva la venta de la Lotería de Navidad a otro nivel. En este sentido, la ibicenca explica que desde el 1 de marzo empieza a preparar el siguiente año, viajando a Madrid para intercambiar décimos con otras administraciones. «Este es el tercer año que traemos números de todas partes, desde el norte hasta el sur del país. Solo me ha faltado este año Melilla. La gente lo agradece, sobre todo los que no pueden viajar o quieren tener números de lugares como Madrid, Barcelona o Valencia, que son donde más suele tocar», explicó.
Asimismo, Sonia apunta que este año han tenido muchas peticiones especialmente del 13 «aunque no lo tenían» y numeros habituales como los terminados en 69 o el 15, conocido como la ‘niña bonita’. «En mi caso tengo el 80317 o el 34051 íntegros. Esos son míos y me gusta tenerlos siempre. Además siempre suelo pedir del año en el que estamos y en el que entramos, en este caso el 24 y 25. Los piden mucho, ahora solo me queda el 24», aseguró la responsable de ‘La 4’.
En este sentido, Sonia recuerda que si vas a compartir décimos con familiares o amigos, una práctica habitual, es recomendable tener eb cuenta varios consejos por si resulta premiado. «Lo mejor es escribir el DNI y la firma de todos los participantes por delante o por detrás del décimo. Esto garantiza que no haya dudas si llega el momento de cobrar un premio», afirmó asegurando que «ya nos toca este año repartir algo grande» ya que Ibiza solo ha podido celebrar un segundo premio de este sorteo, concretamente el número 51244, vendido por la Administración de Sant Antoni en 2017.
Además, apunta que para premios superiores a 40.000 euros Hacienda se quedará con un 20%, por lo que es importante que todos los participantes estén de acuerdo con cómo se repartirá el premio neto.
El Niño, el gran desconocido
Aunque la Lotería de Navidad se lleva toda la atención, el sorteo del Niño, celebrado el 6 de enero, también despierta interés en muchas personas. «Ya hay gente comprando también numeros de El Niño. La gente está equivocada, premia más El Niño pero es cierto que en cantidad de personas agraciadas gana la Lotería de Navidad», explicó Sonia asegurando que a la gente «le gusta El Niño porque pueden regalarla para Navidad o para Reyes».
De hecho, en el sorteo del Niño, Ibiza ha tenido más fortuna: en 1996 cayó parte de un segundo premio, repartido por una administración de Vila.
Hasta entonces, las administraciones de la isla siguen llenándose de ilusión mientras los clientes buscan hacerse con ese número que podría cambiar sus vidas. ¿Y si este año es el de Ibiza?
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