La Sección Segunda de la Audiencia de Palma juzga este martes (10.00 horas) a tres hombres que en julio de 2023 fueron sorprendidos en un domicilio de la localidad ibicenca de Sant Antoni de Portmany con diversos tipos de drogas valoradas en más de 35.000 euros.
La Fiscalía pide un total de 20 años de prisión para ellos como supuestos autores de sendos delitos contra la salud pública. También solicita que se les condene al pago de multas que suman cerca de 70.000 euros.
Según relata el representante del Ministerio Público en su escrito de acusación, el 29 de julio de 2023 agentes de las fuerzas de seguridad del Estado llevaron a cabo el registro de un domicilio del municipio ibicenco. En su interior se encontraban los tres acusados, de origen senegalés, con documentación española y privados de libertad desde entonces, y otras tres personas que no han sido identificadas.
En la vivienda encontraron numerosas sustancias estupefacientes que poseían con la supuesta intención de venderla a terceras personas. En concreto, los agentes incautaron 62 gramos de cocaína, 30 gramos de ketamina, seis kilos de MDMA y 4,71 kilos de cannabis --tanto resina como cogollos--, todo ello valorado en 35.034 euros.
Además, en el momento de su detención los acusados llevaban encima un total de 8.500 euros en efectivo supuestamente obtenidos con la venta de las drogas y otras pequeñas cantidades en libras esterlinas.
La Fiscalía atribuye la propiedad de diversas cantidades de droga a cada uno de los acusados, en función de lo que solicita diferentes penas de prisión y multa. Mientras que para los dos que supuestamente tenían menos estupefacientes pide seis años de cárcel, al que se le asigna mayor cantidad se enfrenta a una pena de ocho años.
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