Imagen de archivo del centro de menores Parey Morey.

El Consell d´Eivissa aseguró este sábado que, por el momento, no se plantea devolver como el Consell de Formentera la competencia de menores al Govern, aunque la institución ibicenca reclamó apoyo para poder gestionar y atender a los menores extranjeros no acompañados que llegan a la isla.

Según afirmaron este sábado a este rotativo fuentes de la máxima institución insular de Ibiza, el coste que supone cada plaza y la «dejadez» del Gobierno de Pedro Sánchez en política exterior, principalmente en las relaciones con Argelia, pueden llegar a desembocar en una situación «inasumible», aunque todavía se está a tiempo de adoptar medidas para evitarlo. En este punto es preciso recordar que, debido a la situación límite de capacidad en la que se encuentra el centro de menores Pare Morey, el Consell d’Eivissa sacará a adjudicación la gestión de un total de 16 plazas destinadas a la acogida en Ibiza de menores extranjeros no acompañados (más conocidos por sus siglas, menas) para lo cual la institución destinará cerca de 7,8 millones de euros en cinco años para habilitar estas 16 plazas, divididas en lotes de ocho, y que deben sumarse a las 40 ya existentes.

En Formentera, cabe recordar que el Consell atraviesa un momento complicado debido al elevado número de pateras que llegan a la isla. Tanto es así que el presidente insular, Llorenç Córdoba, anunció el viernes el inicio de los trámites para devolver al Govern balear la competencia en menores. El Consell es el responsable de los menores extranjeros no acompañados que llegan a Formentera a bordo de estas embarcaciones, pero carece de recursos humanos, materiales y económicos para hacerse cargo de esta tutela. Por este motivo el presidente ha tomado la decisión de retornar la competencia a la Conselleria balear de Asuntos Sociales, dirigida por la popular Catalina Cirer.

Según los últimos datos proporcionados por el Consell a principios de este mes de septiembre, en lo que va de año han llegado a Formentera un total de 95 pateras a bordo de las cuales han arribado a la isla 1.500 personas. En estos momentos, el Consell tiene tutelados a cerca de 80 menores que, al carecer la isla de instalaciones propias, debe desplazar a centros ubicados en Ibiza, Mallorca o la Península, haciéndose cargo de los costes de la tutela. Un gasto que la institución no puede asumir en este momento «por supervivencia», según dijo el presidente.