Centenares de pescadores salen en busca de los primeros ‘raors’ de la temporada. | Arguiñe Escandón

Cada primero de septiembre los pescadores marcan esta fecha en el calendario. El motivo se debe a que se abre la veda de pesca de los raors, uno de los pescados que más apreciados y buscados por muchas personas en Ibiza y que se puede capturar hasta el próximo 31 de marzo de 2025, momento en que se volverá a imponer la veda con el fin de proteger la especie y asegurar una pesca sostenible. Muchos de estos pescadores incluso se cogen el día libre para no perderse esta gran cita marítima.

Desde bien temprano por la mañana muchas familias, o algunos en solitario, ya comenzaban a zarpar por el mar con el fin de coger el mejor lugar para encontrar algunos ejemplares. Algunos incluso deciden salir la noche de antes para quedarse allí y la mañana del uno de septiembre moverse hasta su lugar.

Vila

En Vila el punto de salida era desde la pasarela de sa Punta, una localización común entre los pescadores que salen desde la ciudad. Aunque algunos salieron antes de las 07.00 horas de este domingo aguantaron la jornada hasta casi las 17.00 horas, cuando dieron por concluida esta jornada de primeras capturas.    Se suele decir que los raors se suelen pescar en los momentos de más luz, por ello, se suele empezar a pescar a media mañana.

Pep Ribas es uno de estos pescadores que se embarcó en la lancha desde buena mañana con su compañero Joan y que vino ya bien entrada la tarde. «No nos podemos quejar con la pesca de hoy a pesar de cómo estaba el mar», afirmó Ribas, quien tradicionalmente sale cada año para hacer su pesca.

«Todos los años intento pedirme el día. Es como un rito. Siempre salgo con mi padre, pero ahora al ser mayor no ha venido, aunque a partir de mañana iré con mi hijo para enseñarle», explicó Domingo Mondragón, que llegaba a la misma hora que Joan y Pep.

Y todos concuerdan en que no se pueden perder la cita. José Manuel Salazar fue con su amigo hasta LaMola para poder recolectar las mejores piezas que luego harán a la plancha.

«La pesca de los raors es algo que es tradición de toda la vida en Ibiza y se sale para poder coger unos cuantos», explicó Juan Vicente Riera, quien junto a su familia pescó una buena cantidad de estos ejemplares por la zona de es Freus.

Aunque normalmente la gente que se acerca hasta sa Punta es para coger su barco e irse a pescar, hay otros que prefieren verlo desde fuera. Joan Roig fue pescador durante muchos años y desde que no puede salir por motivos de salud, se acerca hasta el varadero para ver cómo se van y cómo salen las barcas.

«Primero salí con mi padre y después con mis hijos. Ellos ahora mantienen la tradición, les gusta mucho. No sé si los nietos la seguirán», cuenta este antiguo pescador que lleva este oficio en el alma.

Sant Antoni

Otro de los puntos de la isla donde la gente se lanzó al mar en busca de este preciado bocado es Sant Antoni. En este sentido, el Náutico de Portmany se llenó de familias y amigos que han querido disfrutar de este especial día, aún con condiciones algo adversas. Y es que el tiempo no acompañó del todo, pues el mar estaba algo revuelto por el viento. «Ha sido un poco incómodo porque ha habido un poquito de viento de gregal. No ha habido mucha ola, pero sí viento y eso siempre dificulta», señaló Toni, que se iba a casa acompañado de su padre y algunos amigos con un poco menos de 50 ejemplares de raor como cada 1 de septiembre. «Si se puede, lo hacemos cada 1 de septiembre», puntualizó. Este vecino de Sant Antoni señaló que en esta ocasión han sido menos los pescadores que se embarcaron el primer día en busca de raors. «En Cala Tarida hemos visto muy pocos barcos y al mediodía todos han desaparecido», añadió. Lo mismo opinaba otro de los pescadores del municipio, que se encontraba recogiendo la pesca del día. «En Cala Aubarca, que es donde solemos ir y que siempre estaba lleno, esta vez no vimos casi nadie», explicó un vecino que se iba a casa con «unos 32 o 33 raors» en un «divertido día». «Siempre solemos pescar más o menos lo mismo, no varía mucho», añadió.

Los que decidieron aventurarse en aguas de Formentera tampoco gozaron de mejor mar aunque algunos, eso sí, algunos volvieron a Ibiza con buena pesca para celebrar el primer día sin veda. «En Formentera había muy mala mar pero mira, nos volvemos con un bueno puñado. Mañana tenemos buena comida en casa», exclamó entre risas Juan, pescador de la zona.