Imagen del rescate del precipitado en Es Canar. | Bomberos de Ibiza

Los Bomberos de Ibiza han tenido una noche de Vuit d'Agost con dos servicios "relevantes" (por su riesgo) al mismo tiempo: un precipitado en Es Canar, un incendio urbano en un bloque de viviendas de Sant Miquel y una apertura de puerta en el centro de Vila.

A las 21:41 horas se recibió el aviso de que un joven de 25 años de nacionalidad francesa se había accidentado por un acantilado de 20 metros de altura en Es Canar. El cabo de guardia y tres rescatistas del Grupo de Rescate Vertical (GRV) se dirigieron hasta el lugar en un vehículo ligero para asistir al precipitado.

Una vez allí, los bomberos reconocieron que la víctima había quedado enriscada, es decir, no sufría daños pero ya no era capaz de subir o bajar del lugar en el que estaba. Se montaron líneas de rescate hasta la víctima y un rescatista auxilió al joven francés hasta arriba del acantilado.Tras realizar el rescate vertical, la víctima quedó en manos del SAMU061. El servicio terminó a las 00:21 horas.

Paralelamente, el cuerpo de Bomberos fue alertado de un incendio en un edificio residencial de dos plantas del núcleo urbano de Sant Miquel, concretamente en la calle Joan Planells i Torres. Se recibieron numerosas llamadas a partir de las 22:25 horas ya que el fuego se inició en un bajo con las ventanas abiertas por lo que el humo y las llamas eran muy visibles.

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Cuatro bomberos se desplazaron en autobomba hasta el bloque de viviendas y, a su llegada, pudieron comprobar que el fuego se inició en una cocina y que la vivienda estaba totalmente afectada por el humo. Una de las habitaciones ardió con mucha carga térmica, según informan desde Bomberos de Ibiza, hasta el punto de que la bobadilla del techo se desprendió en algunas partes.

El destacamento pudo controlar el incendio por la noche, si bien las labores de extinción se alargaron. Los dos inquilinos, un hombre y una mujer, no podrán volver a la vivienda hasta que sea revisada por si hay daños estructurales. Los bomberos regresaron al parque a las 00:49 horas.

Apertura de puerta

Por último, a las 01:18 horas de la madrugada se recibió el último de los avisos de esta noche tan ajetreada. Se requería un servicio de apertura de puerta en una vivienda de la calle Juan Castelló Guasch, en Vila. Por lo visto, una mujer italiana estaba atrapada en su cocina en un estado de nerviosismo y requería asistencia para salir.

Tres bomberos desplazados en un vehículo ligero forzaron la puerta con maquinaria hidráulica al comprobar el estado de nerviosismo de la víctima. A las 01:58 horas ya estaban de vuelta en el parque de bomberos.