Se trata de un negocio con un nuevo concepto: «aperitivos y shopping». | Toni Planells

Este sábado abre sus puertas Marengo Copas & Moda en plena calle Santa Agnès, el corazón del conocido como West End de Sant Antoni. Al contrario de lo que cabría esperar según la experiencia de las últimas décadas en esta localización, no se trata de un negocio destinado al ocio nocturno.

Tampoco se trata de la iniciativa de algún inversor extranjero con intención de enriquecerse a base de las borracheras de sus compatriotas.

Se trata de un negocio con un nuevo concepto: «aperitivos y shopping», tal como lo define su responsable, Miriam Ribas Bamberger, sin dejar de trabajar en los preparativos junto a Maya y a Olivia para tenerlo todo listo para la inauguración de este sábado, que se celebrará de 13.30 horas a 16. 00 horas.

Miriam Ribas Bamberger, en su nuevo local.

Se trata de un local dividido en dos espacios conectados. Por un lado, «aprovechando que el local también tiene licencia de bar, hemos preparado un espacio para tomar el aperitivo durante el día». Por otro lado, un comercio de moda, «donde hacer shopping antes o después de tomar el aperitivo», un sector en el que Miriam tiene 25 años de experiencia, de los que los últimos 15 ha estado al frente de su propio negocio, Marengo, que ahora se traslada a la calle Santa Agnès «con el hashtag #canviemSantAntoni».

Tampoco dejan de pararse amigos y vecinos de la zona para felicitar a Miriam e interesarse en su nuevo proyecto. Entre ellos, Toni o Isabel. «Ahora vendrá gente pronto por aquí, antes de emborracharse», celebra Toni con humor mientras Isabel expresa con contundencia que «ya era hora de que empezaran a quitar toda esta mierda».

Isabel es vecina de Sant Antoni de toda la vida y asegura que «ya era hora de que los primeros valientes se animen a venir a esta zona, a ver si entre todos conseguimos convertirla en una zona comercial y agradable de nuevo».

Isabel tiene un negocio desde hace décadas en la calle Sant Antoni, muy cerca de la Santa Agnès, y asegura estar harta de «encontrarme cada mañana la verja meada y llena de porquería». La veterana vecina portmanyina explica que «cuando tenía 15 años trabajé durante un tiempo en este local, cuando era un museo, con la abuela de Miriam».

La historia

Efectivamente, donde este sábado abre sus puertas Marengo Copas & Moda fue un museo etnológico durante la primera mitad del siglo XX que abrió Catalina Marí Llàcer, abuela de Miriam. «Mi abuela ya era una emprendedora como yo, que también soy muy ‘fenicia’. Por eso este negocio no tiene más remedio que salir bien; este lugar tiene alma». Un alma que se materializa en mochos de los elementos decorativos de la tienda, con sillas, muebles y esculturas que han formado parte del patrimonio familiar de Miriam, Can Figueretes.

«Nuestra familia tenía una tienda de esas en las que había de todo, Can Figueretes, se vendían desde alpargatas a discos y pienso. Además, mi abuela montó allí un anticuario», explica Ribas para añadir que, «en los años 20 construyeron la casa, donde mi abuela montó también el museo y donde estuve viviendo con mi familia cuando era pequeña».

«Al principio, con un pestillo bastaba para abrir y cerrar la puerta de madera para entrar a la casa por el jardín», recuerda Miriam, quien explica que «ya cuando iba al colegio te empezabas a encontrar a gente durmiendo la mona delante de casa y mi padre fue creciendo el muro y la puerta cada vez más hasta que se nos acabó comiendo». «Entonces, en el 80 mi padre construyó un edificio y montó el bar Golden Gate, que llevó durante muchos años antes de alquilarlo», explica Ribas, quien afirma que «los últimos años ha sido un agujero oscuro y ahora vengo para darle la vuelta».