Beni se hizo cargo del Lopoldo’s en febrero de 1994. | Toni Planells

El próximo día 30 de junio, domingo, Beni, Benigno Rodríguez, servirá sus últimas raciones de pulpo a la gallega, cocinado por María Macia, que han venido llenando el Leopoldo’s, en Es Viver, durante décadas.

Beni se hizo cargo del Lopoldo’s en febrero de 1994. Se hizo con las riendas del negocio de la calle Pedro Matutes Noguera tras haber estado trabajando como empleado «durante un par de años». «El local llevará unos 47 años abierto, desde que se construyó el edificio», explica Benigno, que recuerda que «el nombre se lo puso el primer propietario, Francisco, en homenaje a su padre».

«Francisco estuvo un par de años antes de que lo alquilara Roberto, que estuvo unos siete años antes de que lo llevaran Amable y Olegario», recuerda Rodríguez respecto a la relación de responsables que ha venido teniendo el establecimiento antes que él mismo se hiciera cargo del negocio.

«Cuando me hice cargo, tuve que hacer una reforma total del local: pusimos un suelo nuevo, un toldo y renovamos la cocina por completo junto a María, que entró a trabajar conmigo desde el principio», explica el hostelero, que también renovó la oferta del Leopoldo´s: «Como somos gallegos, introdujimos el pulpo a la gallega, que junto al rabo de toro se ha convertido en uno de nuestros platos más populares».

«Aquí, el pulpo a la gallega gusta un poco más blando que en Galicia, que se lo comen un poco más duro», explica María, que asegura que «si en Galicia hay que hervirlo unos 20 minutos, dependiendo del peso y de la cantidad, aquí hay que cocerlo alrededor de una hora para que quede al gusto de los ibicencos». Sobre los secretos de la cocina de María, la cocinera reconoce que «no hay más secreto que un producto de calidad y fresco, siempre que podemos usamos producto ibicenco».

Sobre la clientela del Leopoldo’s, tanto Beni como María aseguran que «hemos visto crecer generaciones aquí dentro, Corina, que era una niña que venía con sus padres y sus abuelos, ya se ha casado y ya es madre». «Mis nietas se han criado aquí y ya son mayores», asegura Carmen, vecina y clienta del Leopoldo’s «desde que lo llevaba Roberto». «El pulpo está mejor que en Galicia y el servicio y la confianza son espectaculares» subraya Carmen, que asegura que su marido «se solía juntar todos los lunes (cuando libra) con sus compañeros a pasar aquí lo que ellos llaman ‘los lunes al sol’».

Además, el perfil de clientes del Leopoldo’s abarca «desde la gente del barrio hasta extranjeros que vienen cada año y con los que ya ha nacido cierto vínculo», tal como queda reflejado en el fuerte abrazo de despedida con el que María y Beni se funden con una pareja de clientes extranjeros antes de que vuelvan a su país.

«Que disfrute de la jubilación»,le    desea Félix, cliente del Leopoldo’s «desde que llegué a Ibiza desde Córdoba hace 39 años». «Este es el típico lugar en el que ni siquiera tienes que pedir, ya saben lo que quieres antes de que te sientes a la mesa», explica Félix mientras Beni reparte el número de lotería que lleva años apostando desde su bar: el 85129. «Total, si no toca nunca», exclama Juan ‘Tinajas’, otro de los clientes habituales a quien Beni describe con humor como «el negativo del bar».

«Ya le toca descansar un poco», coinciden en afirmar ambos clientes sobre Beni, de quien recuerdan que «a las seis de la mañana ya solía estar al pie del cañón hasta las tantas de la noche, y sin cerrar ningún día». Un horario que Rodríguez confirma matizando que «hace un par de años que empecé a abrir a las 10 y ahora cierro los sábados para descansar».

Un descanso que se convertirá en indefinido a partir del próximo mes de julio, no sin celebrar antes el último domingo del célebre pulpo a la gallega del Leopoldo’s.