imagen de archivo del pleno de noviembre de 2022 en el que se aprobó por unanimidad el nuevo contrato de limpieza y gestión de residuos.

El Ayuntamiento de Santa Eulària confía en adjudicar pronto el nuevo servicio de limpieza en el municipio. Sin querer precisar una fecha, y si no surgen imprevistos, la alcaldesa Carmen Ferrer no descartó ayer que la nueva contrata pueda estar adjudicada durante el primer semestre del año. La empresa ganadora dispondrá después de un plazo para su entrada en funcionamiento.
«Para nosotros es un logro importante porque los pliegos recogen la modificación de la normativa medioambiental del Govern y ya se incluyen diversos condicionantes. El año pasado salió a licitación y ahora el proceso se encuentra en la apertura de plicas», relató Ferrer.

La edil recordó que dos empresas optan a la concesión (Valoriza y FCC). Cabe destacar que la actual concesionaria, Herbusa, no se ha presentado a este concurso. En estos momentos está en valoración la parte técnica de las diferentes propuestas y, posteriormente, será la parte económica la que deba ser estudiada.

En noviembre de 2022, el Ayuntamiento aprobó en sesión plenaria y por unanimidad el expediente, los pliegos y el inicio de la licitación del nuevo contrato de limpieza y gestión de residuos que tendrá una duración de 10 años (ampliable otros dos). Este contrato supondrá la incorporación de importantes mejoras como la recogida orgánica a particulares, la implantación del sistema voluntario de identificación para establecer mayores descuentos a quienes más reciclen o el uso de una aplicación para que los particulares puedan ofrecer los residuos voluminosos todavía funcionales de forma que puedan ser aprovechados por otras personas.

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El contrato supondrá cerca de 8,8 millones de euros anuales de gasto frente a los 7,2 actuales.
Desde el equipo de gobierno municipal recordaron que, entre los objetivos de la nueva concesión, se buscará fomentar la separación y el reciclaje y se intentará aprovechar al máximo los recursos disponibles e incrementarlos para ampliar prestaciones. El contrato, cuya adjudicación ha sufrido cierto retraso, cubre tres tipos de servicios, siendo el más destacado el relativo a la recogida de residuos. En este apartado se producirán numerosas modificaciones respecto al servicio actual como es la ampliación de la recogida orgánica a particulares. Con esta medida se prevé que, en un corto plazo, el 15% del rechazo que se recoge actualmente (7 de cada 10 toneladas de residuos aproximadamente) pase a ser recuperado para la realización de compostaje, convirtiendo un deshecho en un producto y alargando la vida útil del vertedero de Ca na Putxa.

Por otro lado, en este punto también se prevé implantar un sistema de identificación personal y voluntario en el momento de depositar los residuos. Este método permitirá identificar a los usuarios que más y mejor separación de restos realicen contribuyendo a una mayor sostenibilidad y reciclaje. Como ‘premio' a esta mayor concienciación se aplicarán políticas de bonificaciones.
«Habrá un proceso de comunicación e información a los ciudadanos, incorporando la recogida orgánica a nivel general en todo el municipio», señaló Ferrer.

En los pliegos se contempla la compra de 850 contenedores (310 para cubrir posibles roturas y 540 para ampliar las coberturas) y mejoras en el personal y medios disponibles para que el servicio sea más eficaz y dé mejor cobertura a todos los ciudadanos. También crecen de forma considerable los contenedores disponibles para reciclado y ropa, pasando de 26 a 60. Con todo ello, se estima que se puedan conseguir incrementos en la recogida de papel en un 37%, de envases en un 28% y de vidrio en un 34%.