Tráfico todavía no se ha pronunciado sobre la instalación de un radar a la altura de Can Guillamó. | Arguiñe Escandón

El conseller responsable de Infraestructuras Viarias, Mariano Juan, ha reconocido este jueves que siguen a la espera de que la Dirección General de Tráfico autorice la instalación de un radar en el tramo viario situado frente a Can Guillamó, en la carretera de Sant Antoni, donde se han registrado graves atropellos. Según Juan, en diversas ocasiones han requerido a Tráfico este radar, aunque siguen a la espera de una respuesta por parte de la Dirección General puesto que «es la solución definitiva, rápida y barata» a lo que sucede en este punto.

El conseller ha recordado que se trata de un tramo «conflictivo», principalmente debido al exceso de velocidad de muchos vehículos que transitan por la carretera.

Juan ha asegurado que Tráfico está estudiando la viabilidad de la petición del Consell, así como otras soluciones. «Se comprometieron a contestar por escrito lo más pronto posible», ha reiterado.
En función de las medidas sugeridas, el Consell aplicará después aquellas acciones de mejora sobre las que tiene competencias y si la DGT considera que debe instalarse el radar, podrá comprobarse cómo el problema se soluciona con rapidez, según declaró el conseller.

Con los vecinos de Can Bonet, muy preocupados por la falta de seguridad viaria en este tramo, se han pactado varias medidas que el Consell d'Eivissa pudo impulsar. En este sentido, Mariano Juan ha puntualizado que la institución posee la titularidad de esta vía, aunque es el Govern quien la gestiona y, por tanto, cualquier actuación prevista debe recibir la aprobación del Ejecutivo balear.

El paso de peatones donde el lunes fue atropellado un octogenario.
Foto: Irene Arango.

Entre las acciones ya ejecutadas, ha detacado el incremento de la señalización en la zona, colocándose además señales luminosas que aumentan la visibilidad en este tramo viario. «Si la gente no respeta la velocidad o, como en el último accidente, no para frente a una luz roja, es cuando pasan estas cosas», ha lamentado el conseller.

Can Tomàs

Sobre la problemática existente en el paso de peatones de Can Tomàs, donde el lunes fue atropellado un octogenario, Juan ha avanzado que estudian poder desplazar este paso y que no esté tan cerca de la rotonda.

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«Esto implica obras, expropiaciones y aceras más largas y es algo que debemos estudiar porque el Govern, cuando les trasladamos las peticiones de los vecinos, nos indicó que las soluciones no deben ser parches concretos en una zona, sino que hay que hacer un estudio global de todo este lugar», ha declarado el conseller.

Otra posibilidad en estudio es si, tal como pedían los vecinos, los conductores pueden acceder a Ses Païsses desde este punto y no sólo desde la E-30. «En esto estamos, elaborando un estudio», ha reiterado Juan, quien ha reconocido que, a su juicio, no tiene ningún sentido cómo se construyó el paso de cebra, «que va de una acera a ningún lugar».

Desde la asociación de vecinos de Can Tomàs han lamentado el atropello registrado el pasado lunes y han recordado que, en numerosas ocasiones, han denunciado este problema de seguridad vial en el barrio. Según han relatado, tras mucho insistir, el pasado año se instalaron unos badenes, por ahora «insuficientes» para reducir velocidades.

Además, hay que tener en cuenta la ausencia de aceras y que los laterales están llenos de hierbajos puesto que no se poda con la periodicidad recomendada.

«Es sumamente necesario que las administraciones actúen y escuchen la voz de los vecinos; que obren con responsabilidad para que estos hechos tan tristes no ocurran. Necesitamos una solución inmediata», han insistido.

El día 9, tanto vecinos de Can Bonet como de Can Tomàs se reunirán con el Consell para abordar posibles soluciones.