Uno de los momentos vividos este martes. | Arguiñe Escandón

El restaurante Bam-bu-ku de Sant Antoni se ha volcado este martes organizando una gran fiesta bajo el nombre de The last dance que buscaba aportar su granito de arena para ayudar a paliar la situación tan complicada que vive actualmente Cáritas Sant Antoni.

Aunque la cifra total del dinero recaudado se conocerá en los próximos días, viendo las instalaciones llenas hasta la bandera, ya se puede confirmar que la fiesta fue todo un éxito y, lo que es más importante, una ayuda muy importante para la entidad ya que recibirá todo lo que se consiga con la venta de las entradas a 10 euros y parte de las consumiciones.

«Situación muy complicada»

En este sentido, el director de Cáritas Antoni Antonio Mohedas ha segurado este martes a Periódico de Ibiza y Formentera que actualmente «cualquier ayuda es buena para intentar mantener las actividades de Cáritas en el municipio ya que las aportaciones tanto del Ayuntamiento de Sant Antoni y de Sant Josep solo cubre el 15 o el 20% de lo que se necesita».

Concretamente, y por poner cifras a la situación, Mohedas concretó que el consistorio portmanyí aporta 15.000 euros y el josepín 10.000 cuando lo que se necesitan son 80.000 euros y que por ello «son fundamentales las donaciones o las iniciativas de empresas privadas del municipio como esta que ha decidido poner en marcha Bam-bu-ku».

Por ello, «teniendo en cuenta que buena parte de los ingresos vienen de lo que se vende en la tienda solidaria de la calle Lepanto y que apenas llega a los 1.000 euros», el dinero que se recaude con esta fiesta se destinará fundamentalmente «a pagar el alquiler mensual de la sede que asciende a más de 2.000 euros, al sueldo de la única persona que está contratada y que es la trabajadora social y al pago de una serie de gastos fijos como luz, agua o gas».

Además, Mohedas llamó la atención sobre el drama de las personas que acuden a Cáritas. No en vano, aseguró que anualmente se atienden a unas 350 familias, «una cantidad que es menor a los primeros meses de pandemia cuando la situación fue totalmente insostenible» pero que, desgraciadamente, «estamos seguros que aumentará cuando acabe el verano y muchos de los puestos de trabajo desaparezcan».

Dj de gran éxito con 16 años

La fiesta fue todo un éxito e hizo las delicias de los más pequeños de la familia así como de sus familias.

El gran protagonista fue sin duda el joven dj de apenas 16 años Harry MC, llegado desde la ciudad inglesa de Liverpool para convertirse en el residente de su propia fiesta en Bam-bu-ku bajo el nombre de El Kiddo.

Este seguidor del dúo de su ciudad CamelPhat, compuesto por Dave Whelan y Mike Di Scala, y que ha aprendido directamente de su padre cuando tenía 11 años, mostró a Periódico de Ibiza y Formentera su satisfacción por transmitir alegría y diversión a través de su música y por ayudar en una iniciativa «tan importante» como es la de ayer para ayudar a Cáritas Sant Antoni.

Además, junto a él, hicieron las delicias de los presentes distintos animadores, sobre todo un grupo en el que había desde un divertido náufrago que jugó con un balón de rugby con los pequeños hasta un par de piratas salidos de la conocida película de Disney, una suspicaz y hábil ladrona, un bobby inglés perfectamente ambientado, una controladora aérea sobre unos zancos o unos policías que intentaban controlarlo todo.

Incluso, no faltaron bailarines, saxofonistas o violinistas que acabaron por completar una jornada histórica en Bam-bu-ku que supondrá un salvavidas para la situación de Cáritas Sant Antoni.