Los loteros, en pie de guerra

Algunas de las administraciones ibicencas, la 1 y la 2 concretamente, se desplazarán hasta la capital para unirse a la manifestación. La práctica totalidad de las demás administraciones pitiusas, un total de 21 en Ibiza (nueve integrales y 14 mixtas) y otras dos en Formetera (una mixta y otra integral), se unirán a la protesta cerrando sus oficinas el mismo día 22 de 12.00 horas a 14.00 horas. Concretamente, se han apuntado a la iniciativa las administraciones 0, 1, 2, 3, 4 y 5 de Ibiza, la 1 de San Antonio y la de Formentera, a las que se une la totalidad de las administraciones mixtas de la isla.

Loteros en lucha
De esta manera, los loteros ibicencos se unen al movimiento denominado Loteros en lucha, que nació en Sevilla con las manifestaciones que venía organizando cada miércoles un movimiento de loteros llamado ‘Los miércoles al sol' con las mismas reivindicaciones que llevarán a todo el sector ante el Ministerio de Hacienda.

Una de las loteras ibicencas que ya tiene billete para ir a la manifestación madrileña es Sonia Sáez, de la administración nº4 de Ibiza, que califica esta manifestación como «hecho histórico» y está convencida de que habrá «un antes y un después» de la manifestación.

Reconoce la situación en la que se encuentra en este oficio como «falsos autónomos que trabajamos para el Estado». No obstante, se considera optimista ya que «hemos levantado la liebre». Mercedes Mayans es la responsable de la administración nº3 y también se suma a la manifestación en Madrid el próximo miércoles día 22. Mayans pone como ejemplo los menos de 80 céntimos que desde la SELAE pagan como comisión por la venta de un décimo de lotería, o los cinco céntimos de euro que reciben por sellar un boleto de La Primitiva, a la hora de justificar las reivindicaciones de la manifestación.

Comisiones
Las comisiones que SELAE paga a las administraciones oscilan entre el 6% de la Lotería Nacional al 4% que reciben por la Lotería de Navidad, pasando por el 5,5% de la Lotería Primitiva. Unos porcentajes que no se han movido desde el año 2004, «mientras que el IPC ha subido un 31%», tal como explica José Antonio Arias, el empleado de la administración nº3. Arias lleva cerca de 30 años trabajando en la administración de Mayans. Durante todo este tiempo ha sido testigo de la pérdida de derechos, a la vez que de la subida de los costes, que ha sufrido el sector lotero en los últimos años. Y es que Arias asegura que el cambio que han sufrido las administraciones desde que dejaron de ser concesiones del Estado con contratos de por vida para convertirse en contratos mercantiles con la sociedad estatal SELAE «ha venido exprimiendo poco a poco» al sector lotero. Argumenta que los responsables de las administraciones se han convertido en «pequeños autónomos que dependen de un solo cliente, que es la SELAE, no quienes compran su décimo. Somos meros intermediarios».

Arias habla del oficio de lotero con verdadero cariño: «Ser lotero es un sentimiento», asegura, y continúa poniendo en valor el ambiente familiar y social que se respira en las administraciones de Lotería: «Es un lugar familiar y tradicional de toda la vida. No es un juego de los que crean adicción».

Un receptor de Sant Antoni, Andrés Navarro, y asegura que la gran mayoría de administraciones, tanto integrales como mixtas, secundarán las protestas del día 22. «Los que puedan irán a la manifestación de Madrid. Los que no puedan ir, estamos en temporada y muchos no podrán, se unirán con las dos horas de paro», precisa. Navarro está convencido de que «la SELAE es una empresa con grandes beneficios que proporciona grandes ingresos al Estado. Sólo con los premios caducados que no llegan a cobrarse nunca ya podrían subir las comisiones». Comisiones que, según recuerda este receptor de Loterías en las Pitiusas, cuando sufrieron el último retoque «solo fue de un 0,5%, y de eso hace ya 17 años». Sin embargo, Navarro mantiene cierta precaución a la hora de mostrar cualquier tipo de optimismo respecto a la respuesta de la SELAE tras las movilizaciones: «No será coser y cantar», pronostica, mientras se teme que «se acabarán tirando la pelota entre administraciones o si ceden en algún punto será con condiciones».