El Ayuntamiento inspeccionó el establecimiento en octubre de 2020, conjuntamente con la Inspectora de Sanidad de la conselleria de Salud del Govern Balear y con el Inspector de la Dirección General de Emergencias, y ordenó la suspensión cautelar de la actividad por no disponer del título habilitante para ejercer la actividad, así como por presentar numerosas deficiencias e infracciones en cuanto al cumplimiento de las medidas de seguridad, así como sanitarias.
El Consistorio ha propuesto una sanción de 225.000 euros por una infracción muy grave al ejercer la actividad permanente mayor sin disponer del título habilitante atendiendo al artículo 104 c) de la Ley 7/2013, de 26 de noviembre, de régimen jurídico de instalación, acceso y ejercicio de actividades en las Islas Baleares. La sanción lleva aparejada una agravante de obstaculización de las labores inspectoras, ya que se habían intentado varias inspecciones policiales con anterioridad a octubre de 2020 sin que se permitiera la entrada a la Policía Local en todas ellas.
El establecimiento también fue denunciado por no disponer del seguro de actividad, una infracción calificada como grave según la Ley 7/2013 y por la cual se ha propuesto una sanción de 16.500 euros. Asimismo, en lo que respecta a la denuncia por la falta de limpieza y mal estado de las instalaciones, el Ayuntamiento ha propuesto otra sanción de 16.500 euros.
Por otra parte, se ha acordado la adopción de la medida provisional de clausura temporal y precinto de la actividad de restaurante que se lleva a cabo en el establecimiento durante toda la tramitación del presente procedimiento hasta su resolución definitiva.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.