El Barómetro de la Rentabilidad y el Empleo de los Destinos Turísticos Españoles elaborado por Exceltur y divulgado ayer, revela que la demanda extranjera cayó un 93 % con respecto a 2019 en Baleares, algo que se plasmó en las 39 millones de pernoctaciones menos en los hoteles de las islas.
La isla que sufrió un mayor impacto fue Mallorca, donde los ingresos se desplomaron el 91,8 % el año pasado debido a la práctica desaparición de la demanda extranjera, con lo que fue el destino turístico del territorio español en peor ha sido el impacto de la crisis derivada de la pandemia de la covid-19.
Ese desplome de la demanda extranjera, según el citado informe, hizo que solo abriera en verano el 24 % de toda la planta hotelera, alcanzando unos ingresos promedio del conjunto de categorías hoteleras, por habitación disponible de 36,7 euros un 54 % menos frente a los 79,8 euros de 2019.
Los mejores resultados , siempre dentro de un contecto negativo, fueron los de Menorca, con caída de los ingresos del 81,6% en 2020.
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