Pepa Marí y Miquel Vericad se ríen durante la votación; el de Guanyem se había despistado mirando el móvil y casi no levanta el brazo. Foto: D. E. | Daniel Espinosa

El pleno extraordinario celebrado ayer en el Consell d'Eivissa dio luz verde a la modificación puntual del Plan Territorial Insular (PTI) para incorporar de manera inicial los preceptos urbanísticos que la Norma Territorial Cautelar (NTC) aprobada en abril de 2017, y que ahora dejará de estar vigente, estableció y que supuso una limitación de la construcción en suelo rústico.

El Partido Popular votó en contra alegando falta de consenso con los sectores afectados. «Son unas medidas totalmente ideológicas que se aprueban con prisas, porque aún quedaba un año y medio de vigencia de la NTC. ¿Tienen prisa porque tienen miedo a que prospere algún contenciosos o por las presiones de sus socios de gobierno?», preguntó Mariano Juan a la consellera de Territori, la socialista Pepa Marí.

Mariano Juan también acusó de prepotencia al «equipo de desgobierno» y de «pasar el rodillo» al aprobar una modificación sin todavía haber recibido el diagnóstico encargado hace un año sobre el PTI aprobado en 2005. Además, Juan explicó que con esta normativa «el suelo rústico sin construir pierde todo su valor y las fincas se abandonarán; quien necesite dinero tendrá que venderla. Está claro que quieren prohibir construir en rústico porque tampoco podrá haber más viviendas turísticas ni más agroturismos». El portavoz del PP avanzó que si el PP gana las próximas elecciones y consigue gobernar tumbarán la modificación aprobada ayer.

Sin embargo, para la consellera de Territori, Pepa Marí, este cambio en el PTI «frenará el uso especulativo en suelo rústico sin perjudicar a los payeses hasta que se lleve a cabo la revisión total del PTI». Una revisión que se tendrá que llevar a cabo la próxima legislatura.

Pepa Marí también señaló que esta modificación «nos deja tranquilos» porque el suelo rústico de la isla dejará de ser «un urbano de baja densidad».

Por su parte, la portavoz de Podem–Guanyem, Viviana de Sans, sacó pecho al asegurar que la modificación del PTI, «basada en el sentido común», impide la construcción de «casoplones». «Hemos mantenido la paz social a pesar de las ganas de liarla del PP, que promovió las 2.500 alegaciones de ‘copia y pega' a la Norma Territorial Cautelar. Hasta sus votantes no quieren que continúe la destrucción de la isla, supongo que la presión del lobby del cemento y el hormigón es muy poderosa pero estamos aquí para defender el interés general y no el de unos pocos. Me gustaría que pasáramos a la historia como los que paramos la destrucción de este lugar del Mediterráneo», sentenció De Sans.

Despiste de Vericad

La votación, en la que Pepa Marí tuvo que avisar al conseller Miquel Vericad (estaba despistado consultando su teléfono móvil) para que levantara el brazo y no volviera a dejar al equipo de gobierno con el culo al aire, terminó con aplausos por parte de los consellers del PSOE y de Podem–Guanyem.

Cuando se publique esta modificación en el BOIB se iniciará un periodo de exposición pública de 45 días en el que se podrán presentar alegaciones. Pepa Marí apuntó que esperan aprobar definitivamente este cambio del PTI antes de que finalice este año.