Según ha informado el Consell, el acuerdo es fruto de la voluntad del área de Patrimonio de actualizar el registro y protección de las torres de defensa, algunas de las cuales no fueron integradas en su momento en el Inventario del Patrimonio Cultural Español de 1968. En concreto, cerca de unas 30 nunca han formado parte de este inventario.
La torre declarada BIC está compuesta de un cuerpo cilíndrico y está hecha con piedra muerta, con la técnica de ‘espina de pescado', además de con cal y tierra. En su base consta de piedras calcáreas rectangulares, dibujando un círculo más amplio.
No existen datos del momento de su construcción, aunque sus características técnicas son similares a las que presentan otras torres, por lo que se puede señalar que fue construida en el siglo XVI.
La conservación es regular debido al abandono y algunas agresiones, como varias mutilaciones intencionadas sufridas.
1 comentario
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esa es una excelente noticia. Enhorabuena