Esta campaña, que se está realizando con la ayuda de agentes del Seprona y otros agentes de la Guardia Civil, consiste en el control de las mercaderías que entran a la isla por vía marítima. Así, se han inspeccionado camiones refrigerados procedentes de Valencia, Barcelona y Mallorca. Desde el Consell han señalado que gracias a esta iniciativa se ha podido detectar un fuerte incremento en las especies pesqueras que entran a la isla sin los documentos preceptivos de comercialización, así como sin las etiquetas obligatorias especializadas de cada producto. Además, se han parado entradas de peces que no cumplen con la talla mínima reglamentaria para su comercialización.
Los agentes proceden al decomisado del género una vez detectan que el transporte no tiene la documentación en regla o que el pez que se quería comercializar es de talla inferior a la reglamentaria. Cabe señalar que las especies más confiscadas son el mero, la rotja, el dentón y el pargo.
Las denuncias han sido remitidas para su tramitación al Jefe de Ordenación Pesquera de la Dirección general de Pesca del Govern de las Illes Balears, que es la administración competente.
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