— ¿Cuáles son las mejoras más urgentes que necesita Sant Rafel?
— En Sant Rafel tenemos un problema muy grave de falta de aparcamiento. Tenemos un núcleo urbano muy pequeño pero viene mucha gente y no hay plazas de aparcamiento suficiente. Queremos que se habilite uno en una zona exterior y concienciar a la gente a que aparque allí y deje el centro para los clientes. Estamos trabajando para conseguir un terreno.
—¿Dónde se podría ubicar?
— El Ayuntamiento es consciente del problema. También les hemos pedido que arreglen el aparcamiento que hay, es de tierra y cuando llueve es un barrizal y en verano es una polvareda. En Sant Rafel tenemos bastante tráfico rodado y en pleno verano entran plataformas de doce metros que cortan el tráfico. No es un problema de ahora sino de hace años y tenemos que buscar una solución.
—Uno de los proyectos que había para Sant Rafel era desviar tráfico del centro, ¿en qué punto se encuentra?
—La idea era peatonalizar o semipeatonalizar, pero el proyecto va ligado al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Llevamos 15 años hablando de lo mismo, pero sigue sin salir adelante. Hay buenas intenciones pero no nos conformamos con intenciones, queremos hechos. Sant Rafel es un pueblo que soporta mucho tráfico. No solo soporta el peso y el uso de sus ciudadanos, sino de toda la isla porque es una zona de paso de gente de Santa Eulària, Vila y Sant Antoni.
—¿Hay un proyecto definido para Sant Rafel?
— Se habla de dos viales, uno que conecte la carretera de Sant Agnès con la carretera de Santa Gertrudis y otro que una la de Santa Agnès con la autovía. Tendríamos dos zonas para descongestionar el tráfico de aquí, pero no se puede hacer nada porque no está hecho el PGOU. Hace ya mucho tiempo que lo pedimos. La ordenación urbanística de Sant Rafel es una de las demandas que tiene la asociación casi desde que se creó hace 30 años. Es una zona con mucha presión ciudadana de paso y uso.
— Aparte de la ordenación urbanística, ¿qué demandan los vecinos para el pueblo?
— También reclamamos más presencia policial en Sant Rafel. La gente aparca encima de las aceras peatonales ya por norma y no pasa nada. Sabemos que no puede ser permanente pero sí que haya más presencia, sobre todo, por el día. También más control de las discotecas y de los botellones que se hacen en las zonas del polígono y los bomberos.
— ¿Cree que se ha solucionado el tema del ruido de las discotecas?
— Hay buena intención, pero desde el Ayuntamiento nos dijeron que es necesario que la gente llame y denuncie para poder actuar. Nos piden participación y tenemos que colaborar. En un principio tienen que cerrar a las seis, pero estos negocios se saltan la normativa porque les da igual pagar las sanciones.
— ¿Qué soluciones se están dando para la acumulación de basura en los puntos de recogida?
— Desde hace tiempo tenemos previsto cambiar los dos puntos de basura más conflictivos. El concejal Pablo Valdés está muy colaborativo y nos tenemos que reunir para encontrar una zona menos conflictiva, porque si los escondemos más puede que se tire más basura, pero al estar tan a la vista dan mala imagen. También hemos pedido algún contenedor más y hemos propuesto al Ayuntamiento que valoren soterrar algún punto más. Sabemos que es más costoso, pero también es más eficaz.
— ¿El problema es la ubicación de los contenedores?
— Hay que decir que hay gente muy incívica, porque el otro día mismo había contenedores de cartón y plástico vacíos pero estaba todo fuera y hecho un desastre. Tampoco es un problema de que no pasen a recoger. Lo tenemos controlado y a las 9,00 horas pasan pero a las 12,00 horas ya está todo sucio. Pensamos que no solo es la gente de Sant Rafel. Al ser zona de paso, como decíamos, y ser puntos tan visibles, la gente tira la basura aquí. Ultimamente tiran muchos escombros y para estos residuos solo hay un vehículo para todo el municipio. Entonces, también hemos sugerido hacer algún tipo de refuerzo y subcontratar otro vehículo.
— ¿Los vecinos se sienten escuchados por la administración?
— Sí, hay buena sintonía, pero no avanzamos. Vamos cambiando de gobierno y siempre el problema es que no hay dinero o de la burocracia y pasa el tiempo y no avanzamos. En Sant Rafel tenemos 15 años de retraso respecto a los otros pueblos. Todos los equipos de gobierno que ha habido, de diferentes grupos políticos, nos han escuchado y hemos estado atendidos, pero parece que nunca hay dinero para Sant Rafel. Cuesta hacer una gran inversión o un proyecto importante.
— Y si hablamos de cosas positivas, ¿en qué ha mejorado Sant Rafel?
—Ha llegado el servicio de agua pública, se ha reformado el centro social de Sant Rafel, se han arreglado caminos o se ha asfaltado la calle que va al colegio. Se hace el trabajo de base y de cuidado pero no es una mejora del pueblo. Tampoco se hacen medidas de embellecimiento. La imagen de Sant Rafel no es de pueblo sino de zona de paso, necesita un embellecimiento para tener un aspecto más de pueblo.
DEMANDA
Unos baños públicos que dependen del plan especial de protección
La Asociación de Vecinos de Sant Rafel reclaman desde hace tiempo la adecuación del aparcamiento que linda con el parque infantil, donde han solicitado la instalación de baños públicos, ya que se celebran muchos «cumpleaños» y es una petición de la Apima. No obstante, lamentan que no se puedan realizar estas mejoras porque falta el plan especial de protección que reclama la Ley de Patrimonio porque afecta al conjunto histórico de la iglesia.
En este sentido, recuerdan que hace ocho años se «perdió la oportunidad» de hacer un proyecto importante que incluía un aparcamiento «bien hecho», un escenario, baños y vestuario.
A pesar de que se pudo realizar el parque infantil, recuerdan que el entorno de protección de la iglesia impide la realización de un proyecto más amplio, por lo que reclaman que se realice el informe de protección necesario cuanto antes para poder actuar.
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