Una imagen promocional de Statuas d Sal.

El 27 de julio de 2013 ofrecieron su concierto de despedida. Más de 5.000 asistentes llenaron la explanada del recinto ferial dejándola pequeña para el evento ya que centenares de personas se quedaron fuera. Esta noche volverán a tocar en la platja de s'Arenal de Sant Antoni y será por una buena causa, la de apoyar a un festival musical en el que creen profundamente. «Si no hubiera sido por Sueños de Libertad, no hubiéramos vuelto a tocar». David Serra, Joan Barbé, Omar Gisbert, Juanma Redondo, Fernando Hormigo se subirán esta noche al escenario de la platja de s'Arenal para tocar las canciones de Statuas d Sal que tanto han sonado en la isla durante los más de 20 años del grupo. Además presentarán el DVD en directo de su último concierto, Klosing Fiesta, y el documental sobre la historia del grupo Puntos suspensivos.

—El de 2013 fue un concierto de despedida, ¿y este?

—Aquello fue una despedida y lo sigue siendo. Creo que lo que hicimos fue parar y acabar con una carrera. Ahora surge la oportunidad de tocar en Sueños de Libertad. Nos pareció una buena idea, además teníamos pendiente publicar el DVD que era una cosa bastante importante para nosotros y aprovechando la circunstancia pensamos que podrían confluir las dos cosas: tratar de colaborar humildemente en que el festival tenga más repercusión en la isla y poder presentar el DVD en directo, el colofón a la trayectoria, o como se quiera llamar. Notamos que la gente siempre tiene ganas de vernos tocar y pensamos: ¿por qué no?

—¿Cómo surgió?

—Fue algo que siempre estuvo en el aire porque Adrián fue seguidor de Statuas d Sal y amigo nuestro. Al final nos hizo una propuesta firme, nos reunimos, lo hablamos, y al coincidir con el DVD, lo vimos claro. Además de que somos amigos y fue muy fácil. El grupo de whatapps de Statuas d Sal ha estado en activo estos 4 años. (Risas).

—¿Podríamos decir que el motivo de este concierto es el de apoyar a Sueños de Libertad?

—Si no hubiera sido por Sueños de Libertad no hubiéramos vuelto a tocar y a la vista está. Es que es un festival que hacía años que la isla pedía. Ya no hablo de la gente de Ibiza, que también, sino que creo que la imagen de la isla, y por supuesto a los que nos gusta la música, o pedimos que en invierno haya propuestas interesantes para los de aquí y los que vengan de fuera. En fin, es que el festival reúne una serie de cosas que es genial. Entre ellas, destaca la propuesta musical, las fechas en las que se realiza, antes de que llegue la explosión del verano. Es algo hecho desde aquí y con gente de aquí, no es una propuesta que venga de fuera. Es una cosa montada por un ibicenco como podría ser yo o cualquier otro que ha dicho: me encantaría que estos grupos pudieran venir a Ibiza y le ha echado valor. Es un festival muy especial.

—¿Qué supone para Statuas de Sal volver a subirse al escenario?

—Dentro del grupo hay varias sensaciones distintas. No por nada, sino porque cada uno ha seguido una trayectoria, musicalmente hablando, distinta. Por ejemplo, en el caso de David y mío, como hemos estado bastante en activo con Projecte Mut, tenemos las sensaciones más recientes. Sin embargo, Omar, como él mismo ha contado, ha estado todo este tiempo sin subirse a un escenario. Para él será más especial. En cuanto a volver a tocar con Statuas, creo que la primera sensación que nos mueve a todos nosotros es un poco de nostalgia. El primer día que quedamos para ensayar o decidir el repertorio, ese día nos movió la nostalgia. Es que son 23 años de trayectoria de un grupo, que se dice pronto.

—¿Cómo será ese repertorio?

—Al ser un festival con tantos artistas no podremos estar tres horas, como la última vez. Por eso hemos tenido que escoger bien el repertorio. Yo no me atrevería a decir que tocaremos lo mejor del grupo porque eso es muy relativo. Ya ponernos de acuerdo entre nosotros ha sido complicado porque cada uno tiene sus ideas. Pero yo creo que la premisa ha sido un poco la de hacer un compendio entre lo que queríamos tocar nosotros y pensábamos que la gente quería escuchar. Creo que hemos conseguido muy buen equilibrio en el repertorio y que la gente va a echar de menos muy poquitas canciones.

—¿Habrá sorpresas?

—Puede haber y seguro que va a ser emocionante porque a nosotros se nos ha puesto la piel de gallina en más de una ocasión. Esto es una reunión de amigos para rememorar toda una trayectoria y hacer feliz a toda la gente que te sigue, que es también una parte súper importante. No hay previsión de nada nuevo ni de volver a tocar. No queremos confundir a nadie ni crear falsas expectativas.

—¿Cómo es ese DVD que presentarán?

—El DVD tiene dos partes. Por un lado las casi dos horas del último concierto al que vinieron casi todos los músicos que habían pasado por el grupo. Después está el documental que hemos llamado Puntos supensivos, en el que a través de muchas entrevista, grabaciones de vídeo inéditas, imágenes antiguas y material que no ha salido a la luz nunca, relatamos en poco más de 40 minutos la historia del grupo. El material gráfico es impactante, es algo muy divertido por un lado y al ver el documental a más de uno se le han saltado las lágrimas. Estamos muy contentos con el resultado.