Alta cocina ibicenca solidaria para luchar contra el cáncer

Así, Can Lluc y sa Brisa se volcaron para obsequiar al más de un centenar de invitados que acudieron al agroturismo atendiendo a la llamada realizada en pos de apoyar, colaborar y recaudar fondos en favor de los proyectos de investigación contra la enfermedad que impulsa la asociación Elena Torres.

De este modo, Can Lluc y sa Brisa se unieron manos a la obra para gestar y dar a luz al primer evento de alta cocina ibicenca solidaria que se ha celebrado en nuestra isla, organizando una exquisita y exclusiva comida benéfica para cuyos platos se emplearon únicamente productos locales de la gastronomía tradicional ibicenca de toda la vida, pero elevados hasta un inigualable nivel de la cocina más vanguardista que se pueda elaborar hoy día.

Mª Carmen Gutiérrez, presidenta y fundadora de la asociación que lleva el nombre de su hija, destacó sobre el espectacular evento gastronómico celebrado en favor de su lucha contra el cáncer que «gracias a lo que se recauda en eventos solidarios como éste podemos seguir dando pasos para continuar ayudando a nuestra investigadora en sus proyectos de investigación sobre el cáncer. A finales del mes de mayo haremos otro acto al que acudirá la investigadora con sus ayudantes para explicar los avances que se están consiguiendo gracias a las investigaciones que están realizando».

Por su parte, Esther Bonet, del gastrobar&catering sa Brisa, quiso destacar que «queríamos colaborar de alguna manera con alguna causa benéfica en la isla y pensamos que aportar nuestro granito a la asociación Elena Torres era una buena idea, ya que el cáncer es una enfermedad que a todos nos toca muy de cerca y la labor que desempeña esta asociación en pos de la investigación y de la lucha contra el cáncer es muy importante».

Sobre el sabroso y exquisito menú elaboraron para tan señalada ocasión, Esther Bonet concretó que «hemos preparado una comida al estilo de sa Brisa, pero trasladada un poco hacia nuestro servicio de catering. Empleamos muchísimo producto ibicenco a los que les damos un buen trato y solamente les aplicamos algunas técnicas de alta cocina».

Dicho menú solidario de alta cocina ibicenca estuvo integrado por sugerencias y propuestas tan deliciosas y apetecibles como croquetas de bullit de peix y alioli de perejil, corazón de alcachofa con salsa kimchi y pistachos, negrito del Mediterráneo con crujiente de yuca, infladito de maíz relleno de queso de cabra y esfera de calabaza, en los aperitivos. En los entrantes se sirvieron tartar de tomate confitado, burratina y aguacate, gamba roja con su cabeza crujiente y espardeña sobrasada. En los platos principales se degustaron rotja con sus escamas crujientes, falso risotto de patata y salda de bullir de peix, así como costillas de Black Angus a baja temperatura con pasta japonesa casera y consomé de cochinillo de porc negre ibicenco. Y finalmente, como postre, los invitados fueron deleitados con un cremoso de chocolate con corazón de melocotón y orejones, en los postres.