Jornadas de puertas abiertas en el hospital Can Misses sin visitantes

Las inclemencias del tiempo de ayer, el frío y la lluvia, y el largo puente festivo no favorecieron que los ciudadanos de Eivissa se acercaran ayer al hospital Can Misses a la jornada de puertas abiertas programada con motivo del Dia de Balears. De hecho, Rosa Marí Colet, la jefa de celadores de Can Misses, y Celia Riera Zapata, una de las celadora del centro hospitalaria, dirigieron la visita sólo a los medios de comunicación que acudieron a la cita de ayer. «Somos voluntarias con cariño», comentaron acerca de su presencia en el hospital en un sábado de puente. Primero se desplazaron a la zona de consultas externas y mostraron la zona del gabinete de digestivo, las salas para realizar las pruebas como endoscopias. Después a hemodiálisis y al centro de día oncológico en la que se ofrecen los tratamientos de quimioterapia, «una de las partes nueva que ha mejorado mucho», explicó Rosa, ya que de ocho sillones se ha aumentado a 22 y con posibilidad de disponer de cuatro camas. Además, el área de consultas permite llevar al paciente en coche hasta la puerta de entrada del edificio, uno de los pocos accesos en los que el paciente tiene la facilidad de no ir caminando. Precisamente, de caminar saben mucho los trabajadores del hospital, sobre todo los celadores. Celia ha llegado a realizar hasta 20 kilómetros diarios. «El día del traslado, de laboratorio antiguo al nuevo, el personal hizo 27 kilómetros pero cargados de material», rememora Rosa de cuando hace casi un año hicieron la mudanza al nuevo hospital. La visita acabó en el salón de actos, ya amueblado y estrenado hace unos meses para el acto de jubilación de los trabajadores, que acogerá un congreso de traumatología en abril.