Los pequeños fueron los protagonistas de una sesión presidida por Carmen Ferrer como primera teniente de alcalde, acompañada por Ana Costa, concejala de Juventud y Educación, y Toñi Picó, de Participación Ciudadana. | Toni Escobar

La franqueza con la que verbalizan sus reivindicaciones los niños y niñas tiene en multitud de ocasiones más solidez y compromiso que cualquier diatriba del político de turno. La transparencia con que transmiten su visión de ese pequeño mundo que les rodea permite a los adultos poner los pies en la tierra y ampliar sus miras cuando el árbol no les deja ver el bosque.

Es lo que sucede cada vez que el Ayuntamiento de Santa Eulària convoca el pleno Infantil municipal, que en el caso del celebrado ayer puso de manifiesto el compromiso de los más pequeños con la vida activa y saludable. Una veintena de alumnos de las 8 escuelas municipales y de los institutos IES Xarc y Quartó del Rei (nuevos miembros del pleno santaeulaliense) dieron cuenta ante la regidora Carmen Ferrer –que presidió el pleno por la ausencia de Vicent Marí, de viaje de trabajo– de sus peticiones para mejorar el entorno y sus condiciones en los centros escolares.

Uno de los proyectos mejor valorados fue el de dos alumnos del CEIP s'Olivera para la zona de los algarrobos, donde solicitaron que se eliminen las malas hierbas, se cultiven más plantas autóctonas y se instale un ‘pipican'. «A la hora del patio nos gusta salir y jugar pero a veces pisamos cacas o nos caemos por las malas hierbas. Queremos una zona natural porque es una forma de contactar con la naturaleza», puntualizó una pequeña muy sagaz.

Los representantes de los alumnos del municipio también reclaman mejoras en la calidad del agua, la instalación de más papeleras y contenedores o que se aumenten las excursiones y actividades relacionadas con el medio ambiente y la ciencia.

Durante el pleno, dos alumnas del CEIP Santa Eulària dieron cuenta de su participación en el IV Congreso Infantil Unicef celebrado recientemente en Palma. Bajo ese marco territorial, las jóvenes estudiantes denunciaron que las actividades extraescolares «están muy enfocadas a los niños porque lo que más hay son equipos de fútbol» y reclamaron más equipamientos deportivos y el fomento de la igualdad en estas actividades. También informaron al pleno de su solicitud para que se dé más publicidad a los eventos extraescolares, que se mejore el transporte público para conectar los núcleos aislados del municipio y que se promuevan un mayor número de actividades públicas y gratuitas que fomenten la igualdad de género.

Por otra parte, los representantes de cada centro presentaron sus dibujos para el Congreso infantil municipal sobre Vida activa y saludable. La mascota seleccionada fue un gato amarillo diseñado por Carla Cardona Marí, del CEIP Santa Eulària, mientras que el rojo fue el color más votado para simbolizar la salud.