Así, según el consistorio, la utilización de estos nuevos chalecos se llevará a cabo «en breve» y la intención es que «cada policía que esté haciendo un servicio en la calle lleve un chaleco antibalas de protección».
El Consistorio también advirtió que se ha solicitado de forma oficial y por escrito un presupuesto al Colegio Oficial de Psicología de las Illes Balears para llevar a cabo los tests psicotécnicos que deben pasar los agentes que utilizan armas en su puesto de trabajo para que «se convoque, a la mayor brevedad posible, este proceso de evaluación, en virtud de un convenio suscrito entre esta entidad y la conselleria balear de Administraciones Públicas, competente en materia de coordinación de policías locales», informaron desde el Ayuntamiento.
El sindicato FSP-UGT reclamó también la convocatoria urgente de las Juntas Locales de Seguridad porque aseguraron que no hay colaboración ni transparencia informativa entre los cuerpos de seguridad del Estado respecto al nivel de alerta terrorista 3 que fue declarada tras los atentados de París. «Actualmente hay policías en la calle sin información sobre el tema del terrorismo», dijo García Crespín, que explicó que quienes miden más el pulso de la calle y ven los movimientos y lo que pasa son lo funcionarios del Ayuntamiento. También solicitaron la puesta en marcha de un Libro Blanco de Seguridad y Alerta Interior que marque la línea de trabajo y colaboración de todas las administraciones para poder garantizar la seguridad de los ciudadanos y de los agentes.
1 comentario
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A cuantos agentes de la policia local se les ha disparado en las últimas décadas? De verdad hace falta un chaleco para regular el trafico o poner multas de aparcamiento o por no ponerse el casco? Hombre, si es reforzado, no se harán daño cuando se caen por aburrimiento de la silla del bar.