La Comissió Balear de Medi Ambient ha acordado solicitar que el proyecto de recuperación ambiental de la desembocadura del río de Santa Eulària se sujete a una evaluación de impacto ambiental y se autoriza que se haga por tramitación de urgencia.
Entre otras cosas, el Servei de Protecció d'Espècies (dependiente de la Conselleria de Medi Ambient), informó desfavorablemente el dragado que se hace sobre la pradera de Cymodocea nodosa, que es una hierba que crece enraizada en los fondos marinos.
«La adaptación del proyecto de recuperación ambiental al infomre del Servei de Protecció d'Espèciees impide conseguir un calado de un metro en toda la bocana del estuario y, por tanto, no se consiguen condiciones de navegabilidad seguras», dice la Comissió Balear de Medi Ambient. Asimismo, el material dragado se considera material «contaminante» por metales pesados en base a las analíticas aportadas, por lo cual no se podrán verter directamente al medio y tendrán que ser gestioandas de acuerdo con al ley. Se trata de cuatro focos de contaminación por mercurio, plomo y cobre.
Asimismo, se dice que el punto de recogida selectiva de la ribera norte se tendrá que reubicar más hacia el interior.
El conseller de Territori, Mariano Juan, explicó que lo que ha aprobado la Comissió Balear de Medi Ambient es un trámite para agilizar la evaluación de impacto ambiental, que además ya está hecha y enviada y pendiente de su aprobación por parte de la comisión.
Desde el Ayuntamiento de Santa Eulària indicaron que se fundieron los dos proyectos (el que lleva el Ayuntamiento, que afecta más a la desmbocadura, y el que lleva el Consell), por lo que la evaluación vale para ambos.
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