Los regidores Vicent Torres, José Luis Pardo y Jaume Ribas recordaron en rueda de prensa que el aparcamiento se abrió al público en agosto de 2010, que tiene cuatro plantas soterradas y 425 plazas pero que desde un primer momento «ya se vio que esta mega-obra del alcalde Vicent Marí iba a convertirse en un negocio ruinoso».
Las obras tuvieron un presupuesto de 5,6 millones de euros y se adjudicaron, mediante la empresa pública EMSER XXI a la UTE Subsuelos Urbanos SL, que desde hace mucho tiempo no cumple con sus obligaciones con el Ayuntamiento ni paga las nóminas a los trabajadores.
Torres denunció el «trato de favor que durante mucho tiempo ha dado el Ayuntamiento a esta empresa» y que, en opinión de PSOE-Pacte, está en el origen de los problemas actuales. «Durante mucho tiempo se ha mirado hacia otro lado y esto, junto con una gestión muy deficiente de la empresa, nos ha hecho llegar al punto en el que nos encontramos ahora, cuando el problema ha crecido y tiene difícil solución», añadió Torres.
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