Las molestias que generan los grandes buques que hacen operaciones de carga y descarga, así como de tráfico de pasajeros en el puerto de Sant Antoni continúan. A principio de esta temporada, los vecinos y usuarios del Club Náutico transmitieron su malestar por los ruidos, las olas que se generan cuando los buques hacen las maniobras de atraque y la congestión en el tráfico que supone la carga y descarga «de grandes plataformas».

La principal preocupación para la asociación de vecinos de Sant Antoni se centra en la ola que los buques de las navieras Acciona y Baleària generan en la playa de caló des Moro. «Esta ola es peligrosísima. A eso de las once de la mañana viene una ola muy grande que como no estés avisado te puede tirar contra las rocas», expresó Mari Carmen Muñoa, presidenta de esta asociación vecinal.A este respecto, el Ayuntamiento de Sant Antoni pidió a Balearia a principio de temporada «que aminorara la marcha», expresó el concejal de Obras, Servicios y Puertos, Vicent Costa. «Reducen la marcha al entrar en la bahía de Sant Antoni; no teníamos constancia de que continuaran las quejas», precisó Costa. La presidenta de la asociación de vecinos confirmó ayer, tras conversaciones con ciudadanos que viven cerca de caló des Moro, que esta ola se sigue produciendo tras el paso de los buques de las navieras.

A la creación de olas hay que sumar el malestar por la generación de ruidos. «Tenemos muchas quejas por el ruido. Sí que es cierto que hay menos que el año pasado, pero los clientes se siguen quejando», explicó Emma Costa, directora comercial del Club Náutico de Sant Antoni, que precisó que este verano hay menos quejas sobre el ruido que hacen los generadores de estos barcos. «Hay menos, pero porque los encienden menos; aún así las molestias continúan».

El concejal de Obras, Servicios y Puertos explicó ayer que los buques no pueden entrar a más de cuatro nudos «por lo tanto no puede generar ninguna ola». En cuanto al ruido de los generadores aseguró que en esta temporada «ningún» buque pernocta en las instalaciones del puerto, aunque reconoció que «puede haber ruido» cuando se producen las operaciones de carga y descarga.

Otro de los temas más controvertidos en relación a las navieras se centra en la congestión de tráfico que se crea cuando estos buques descargan y cargan los camiones. «Es cierto que hay colapso. Hay que tener en cuenta que vienen con mucha mercancía rodada y salen por la zona del paseo marítimo donde cada 40 metros hay un paso de peatones, está la parada de taxis y las excursiones de las ‘golondrinas', por ejemplo. Aunque no fuera mercancía rodada y sí coches pasaría lo mismo», precisó Costa.

Para la asociación de comerciantes, sin embargo, es «bueno» que lleguen barcos al puerto de Sant Antoni. «El hecho de que haya un horaro de día facilita la llegada de turistas, sobre todo nacionales, que son los que más hemos perdido este verano», expresó Joan Ribas, presidente de la asociación de comerciantes de la localidad portmanyina, aunque puntualizó: «Sí que es cierto que viene cargado de trailers enormes que en el momento de embarque o desembarque crean un gran colapso en el tráfico». Para Ribas, la llegada de estos buques puede contibruir a la desestacionalización del turismo en Sant Antoni. «Si en temporada baja sacasen ofertas atractivas podrían llegar más turistas al municipio», explicó Ribas, quien aseguró que la «ventaja», a diferencia de lo que pasó hace años con Iscomar, «es que la carga no se queda en el puerto».