Vila sube tasas y las multas de la zona azul para saldar la deuda con los proveedores

El Ayuntamiento de Eivissa presentó ayer su plan de ajuste económico para pagar a proveedores entre 30 y 35 días y por el que solicitarán un préstamo de 4.315.000 euros a pagar en diez años con un 5% de interés.
En este plan de ajuste se contempla el incremento de las multas por sobrepasar el límite de la zona azul, que pasará de los 50 a los 80 euros (de 25 a 40 si se pagan antes) y con la que prevén ingresar 180.000 euros que se sumarán a los 250.000 euros previstos por la entrada en vigor del nuevo contrato de la zona azul; la subida del 4% del IBI prevista por el Gobierno central con la que prevén recaudar 410.000 euros, la subida por el uso de las instalaciones deportivas que tiene una previsión de ingreso de 40.000 euros, la tasa de recogida de vehículos que supondrá una entrada de 50.000 euros, el cánon de licencias temporales de taxi, situado en 1.200 euros por mes y por licencia y la tasa de recogida y eliminación de basura (450.000 euros). Por tanto, Vila prevé ingresar con este plan de ajuste 1.560.000 euros.
En el capítulo de reducción de gastos se incluyen la reducción de los contratos de alquiler de edificios como Cijae y el Casal de Dones (40.000 euros), traslado de la escuela de formación (45.000 euros), la reducción de horas extra (30.000 euros) y la eliminación del contrato para el control del acceso al barrio de la Marina (10.000 euros). En total, 125.000 euros.
Este plan de ajuste no incluye, según expresó el primer teniente de alcalde y concejal de Economía, Juan Daura, los 1,3 millones de las viviendas de protección oficial y los patronatos. «Las venderemos sobre el 15 de abril y entendemos que el préstamo se puede amortizar solo, por eso no se incluyen en la cantidad que vamos a solicitar al Gobierno», expresó Daura. Así, en lugar de los 5,6 millones de euros pedirán un préstamo de 4.315.000 euros. Daura señaló que «la gran ventaja» de este plan es que «permitirá al Ayuntamiento partir de cero y así pagar a proveedores en 30 o 35 días».
PSOE-Pacte, por su parte, explicó ayer que este endeudamiento es «inncesario» porque provoca «un incremento del 20% de la deuda municipal». «Después de analizar las 1.246 facturas encontramos que la mayoría se corresponden al período de junio a septiembre. Por tanto, con este plan de ajuste vemos que quieren pagar las facturas del último trimestre de 2011. Quieren endeudar al Ayuntamiento a diez años para pagarlas», explicó el concejal Alfonso Molina, que puntualizó: «Esto significa que en 2022 seguiremos pagando la factura del alumbrado navideño de 2011». PSOE-Pacte señaló, además, que lo más «grave» es que este plan de ajuste prevé ingresos «que se conseguirán básicamente mediante un incremento de impuestos y tasas, mientras la reducción de gastos prevista sólo sube a 125.000 euros y será fruto del cierre o reducción de servicios a los ciudadanos».