Las matriculaciones de Vehículos en las Pitiüses cayeron más la mitad en enero pasado respecto a un año antes según los datos que maneja la patronal de los concesionarios AEMA. El mes pasado se vendieron 84 unidades en Eivissa y Formentera por las 193 del mismo mes de 2010. Del total de ventas del mes pasado, 58 fueron turismos para particulares (-49,12%), cinco vehículos de alquiler (-91,67%) y 17 comerciales (+13,33).
Según el presidente de los empresarios, Roberto Pereyra, «un mes, y menos si es enero, no puede servir para extraer unas conclusiones definitivas, pero los datos del último mes sí que sirven para confirmar la mala evolución experimentada en el segundo semestre del pasado ejercicio».
Eso sí, Pereyra matiza que la interpretación de la caída de enero está afectada por el hecho de que «venimos de un enero de 2010 que fue positivo porque había un programa de ayudas a la compra», un mes en el que, de forma inusual, «una multinacional de alquiler hizo compras que animaron este mercado».

Nuevas ayudas
El representante de la patronal señaló que la actual situación pone en evidencia «que en España se ha seguido la política europea de quitar las ayudas, al igual que en Francia, Reino Unido o Alemania; pero ha quedado claro que aquí las cosas no funcionan igual».
«Necesitamos un plan de ayudas porque aquí tenemos nuestra propia crisis; un plan de subvenciones, quizás un poco más pequeñas, pero más duradero, para que la gente no esté retrasando su compra por si sale un nuevo plan», argumentó el empresario, que consideró positivo el plan Prever en el que se descontaba automáticamente el impuesto de matriculación.
«Iba bien a los concesionarios, a los fabricantes, facilitaba el achatarramiento y favorecía la modernización del parque móvil que, con ocho años de media, es uno de los más anticuados de Europa», añadió.
En cuanto a las ventas, Pereyra reiteró que «los clientes se mantienen a la expectativa» y apuntó que los concesionarios esperan que la temporada turística las anime. «Es de prever que no sea un mal año en la renovación de flotas y, si el turismo aquí depende de otros mercados más que del español y dichos países están algo mejor, es de esperar que aquí haya una recuperación antes que en la Península y que eso se note en las contrataciones y en el consumo», concluyó.

Menos en chapa y pintura, igual en la postventa
Aunque se han producido «agrupamientos de servicios de grupos de concesionarios en un mismo punto» para ganar rentabilidad, la perspectiva es de mantener plantillas y no se prevén cierres de empresas, «aunque hay noticias, no confirmadas, de que algún concesionario está a la venta», dice Pereyra. La situación en los diferentes departamentos «es la de un mantenimiento de la postventa, aunque si vendemos menos en un futuro habrá menos actividad, y lo que sí ha caído son las grandes reparaciones y la chapa y pintura, porque muchos coches tienen menos valor que el coste de reparación».