Gran preocupación entre la clase política y turística de Eivissa ante la huelga de controladores

El conseller de Política Empresarial i Activitats, Joan Serra Mayans, reclamó ayer «responsabilidad» a los controladores aéreos ante la convocatoria de huelga que tendrá lugar la segunda quincena del mes de agosto. En esta línea, Serra Mayans criticó que el sector de los controladores, «que de alguna manera se le puede llamar privilegiado», hagan estos pulsos a la administración «es muy preocupante».
El conseller confió en la actuación de la administración y se mostró esperanzado ante la «actuación responsable» del Gobierno con el fin de que no se perjudique la economía del Estado.
El mes importante
El presidente de la Federación Hotelera de Eivissa, Juanjo Riera, se mostró ayer también preocupado ante esta amenaza de huelga, «justo el mes más importante para la industria turística». Riera no descartó que se produzcan cancelaciones ante el anuncio de los controladores. «Este pulso al Gobierno nos perjudicará a todos y en un sector que es muy frágil. Debemos intentar evitar que se produzca esta huelga», apuntó Riera.
El presidente de la patronal de Eivissa se remitió a la circular enviada por la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), que reclama «valentía» al Ministerio de Fomento a la hora de dar una solución a la situación creada. Además, la CEHAT considera «necesario» que se decreten unos servicios mínimos que permitan que la actividad aérea continúe «o que sustituya esos días a los controladores por personal extranjero o militares.
De «nefasto» calificó el presidente de Fomento de Turismo, José Tur Olmo, el anuncio de la huelga de los controladores. El presidente de la Cambra de Comerç d'Eivissa, Vicente torres, pidió «sensatez porque se juega con la economía de la Isla». Desde Fomento recordaron que el turista «es muy susceptible de noticias de última hora que le puedan producir pánico, como no volver a casa el día que tienen previsto», advirtiendo de que «se corre el riesgo de que se cancelen vacaciones anticipadamente ante la posibilidad de que los vuelos no sean correctos».