Un electricista que declaró ayer como testigo ante el juez José Castro afirmó que cobró 60.000 euros en metálico y sin factura por los trabajos que llevó a cabo en la vivienda que Matas posee en el casco antiguo de Palma, más conocida como 'palacete'.

Ayer por la mañana también fue interrogado un carpintero que realizó asimismo varias labores en la residencia del ex jefe del Ejecutivo autonómico y aseguró igualmente haber cobrado dinero negro por estos trabajos.

Estas declaraciones se suman a las que el magistrado está llevando a cabo para esclarecer las presuntas irregularidades en la compra de la vivienda así como en su reforma. En este contexto, un constructor, Juan Serra, afirmó a finales de noviembre ante el juez que Matas le entregó, a través de su cuñado Fernando Areal, 70.000 euros en negro al comienzo de las obras de reforma que efectuó en el 'palacete' del total de 162.000 euros que percibió una vez finalizados los trabajos.

Precisamente, Areal también se encuentra imputado en este procedimiento y sobre él recaen sospechas de que también efectuó pagos en negro por más de 70.000 euros a la agencia de comunicación Nimbus, encargada de gestionar la campaña electoral del PP en los comicios de 2007.

Mientras tanto, el dueño de una tienda de muebles afirmó que en una ocasión la esposa de Matas, acompañada de una amiga, compró varios muebles en este comercio por valor de 25.000 euros, que pagaron en metálico y que el vendedor declaró como 'ticket de caja' pero sin factura.